La juez del juzgado de intrucción número 1 de Palma, Cristina Pancorbo, reanudó ayer la investigación sobre la movilización masiva de los controladores de la torre de control del aeropuerto de Palma, que se produjo entre los días 2 y 3 de diciembre de 2010. La magistrada tomó ayer declaración a tres de los controladores de Palma, que al igual que los compañeros de todos los aeropuertos del país, alegaron escalonadamente una repentina indisposición para solicitar ser relevados de su puesto de trabajo. Estos tres empleados, asistidos por el letrado José Antonio Choclán, negaron ayer que se hubieran concertado con otros compañeros para desarrollar una huelga encubierta. Dijeron que ellos no abandonaron su puesto de trabajo, si bien tuvieron grandes dificultades debido a que se había cerrado el espacio aéreo del país, por una decisión drástica adoptada por el Gobierno.

Cabe recordar que este juzgado archivó hace algunos meses la causa penal contra 22 trabajadores de la torre de control, que estaban acusados de un delito de sedición. Sin embargo, esta decisión fue anulada por la Audiencia de Palma, que ordenó que se continuara con este caso, que provocó que miles de pasajeros se quedaran sin la posibilidad de viajar, debido a que los controladores, que mantenían un conflicto laboral con el Gobierno, fueron abandonando sus puestos.