Un informe técnico encargado por el Ayuntamiento de Pollença concluye que el empresario Alfonso Cortina puede legalizar su chalé en Formentor siempre que derribe una de las tres plantas.

Una sentencia dictada por el Tribunal Superior de Justicia de Balears (TSJB) en diciembre de 2014 anuló la licencia otorgada por el ayuntamiento de Pollença en agosto de 2005 al empresario por "no ser conforme a derecho" y ordenó a la institución municipal "restablecer la legalidad urbanística infringida" mediante la demolición de lo construido y la resposición de los terrenos a su estado natural anterior. El fallo, que no admitía recurso, dejaba una puerta abierta a la posible legalización de las obras, una fórmula que el alcalde de Pollença, Tomeu Cifre (PP), ya anunció que se estudiaría antes de proceder al derribo de la construcción.

El primero de los informes, el de carácter urbanístico, ofrece la posibilidad del derribo parcial. El consistorio está a la espera de un informe jurídico que confirme la viabilidad de esta opción y que se ajusta a la sentencia del Tribunal Superior.