El grupo parlamentario MÉS ha asegurado que el empresario Bartolomé Cursach "no ha dicho la verdad" a la comisión de investigación sobre la construcción de Son Espases, cuando ha asegurado que no comparte con nadie la propiedad de una finca cercana al hospital.

La diputada de MÉS Fina Santiago le ha preguntado expresamente si compartía con Bartolomé Seguí Gamundí la finca de Son Cabrer, a lo que Cursach ha dicho que no, cuando un documento del registro de la propiedad "demuestra que sí la compartían, al menos parcialmente", ha informado la coalición en un comunicado.

Santiago ha calificado de "muy grave" que una persona que tiene que comparecer ante una comisión parlamentaria de investigación no diga la verdad y ha recordado que al inicio de la misma se le ha advertido de que "hacerlo puede comportar incurrir en delito".

El grupo MÉS ha anunciado que estudiará "qué implicaciones puede tener este hecho".

Cursach ha lamentado ante la comisión seguir siendo el propietario, "por desgracia", de una finca rústica de unos 150.000 metros cuadrados próxima al hospital de Son Espases, que compró en 2003 pensando que Palma crecería por esa zona y en la que no se le ha permitido construir nada.

Sobre la posibilidad de que tuviera información privilegiada, el empresario ha asegurado que se enteró de que se iba construir dicha infraestructura sanitaria con posterioridad a la compra del terreno, "cuando salió publicado en los periódicos".

El empresario ha recalcado que en la actualidad la finca de Son Cabrer "no vale nada por lo que ha pasado", ya que "no dejan hacer nada" en ella. "No me han dejado construir nada allí", ha añadido.

También ha relatado que presentó un proyecto para hacer un geriátrico y hace algo más de un año otro para un centro sanitario y ambos le han sido denegados.

Preguntado acerca de si habría adquirido la finca de haber sabido que veinte años después seguiría teniendo la calificación de rústica, Cursach ha afirmado: "Por supuesto que no, no la compré para sembrar patatas, la compré porque pensé que Palma iba a crecer por ahí".

Ha detallado que la compró "en un momento en que hay una alegría de que todo va a ir bien y que cuando sales del notario lo que has comprado ya vale un 10 % más. Con mentalidad de hoy no se puede juzgar por lo que había en 2001, 2002 y 2003", ha afirmado.