El escándalo del anhelado fichaje de este interino por parte del PP ha avivado las peticiones de dentro del sector de cambiar el sistema para que las contrataciones a interinos se hagan con total transparencia y sin que puedan generar ninguna suspicacia, lejos de lo que sucede hoy.

En los últimos días, las demandas de cambios en el sistema y el abandono de la vía telefónica se han intensificado. La asociación de Interins Docents en Acció (IDEA), que en los últimos años ha realizado una estricta vigilancia de las listas para detectar posibles irregularidades, emitió ayer un nuevo comunicado pidiendo a los partidos políticos y a los sindicatos que "combatan la contratación ilegal". Consideran que los hechos desvelados estos días han de servir para poner fin a las contrataciones irregulares y "a las nuevas plazas que entran y salen de repente de un oscuro cajón".

Creen que ni "la necesaria dimisión de Riera ni la de la jefa del SOIB, Xesca Ramis, serán suficientes para reconducir las históricas corruptelas en las contracciones de interinos".

Por eso piden a todos los partido políticos y sindicatos "su compromiso firme para conseguir la eliminación inmediata de esta práctica, una lamentable plaga".

Desde ANPE se reclamó ayer apostar por la vía telemática, mientras que FETE-UGT demandó una reunión urgente de la Junta de Personal Docente para tratar la polémica de estos días (Junta a la que asistirían por primera vez UOB Ensenyament y Alternativa).

Toni Baos, secretario general de enseñanza de CCOO, recordó no obstante que ellos, junto al STEI-i, FETE-UGT y ANPE ya pidieron en la última mesa sectorial que se celebró aún con Joana Maria Camps al frente de la Conselleria que además de ir publicando la lista de interinos disponibles para cubrir sustituciones (se actualizan cada semana y se pueden consultar en la web de Educación), a la vez se vaya haciendo pública la lista de plazas adjudicadas.

La propuesta de la asociación de inspectores ADIDE pasa por profesionalizar la Administración y limitar las plazas a dedo a los cargos estrictamente de confianza. Los inspectores indicaron ayer que pese a que todas las administraciones han utilizado distintas fórmulas (contempladas por el sistema y dentro de la ley) para rodearse de sus afines en la Conselleria, este caso "no tiene parangón" al haberse creado una plaza nueva -"un traje a medida"- con intereses partidistas: "Algo tan exagerado no había pasado nunca", aclararon fuentes del cuerpo de Inspección.