El Ibisec ha respondido al juez José Castro que sólo tiene localizada una maqueta del proyecto de Ópera para el Moll Vell de Palma, de la dos que fueron encargadas al arquitecto Santiago Calatrava, la Policía tendrá que preguntarle a éste sobre la segunda reproducción.

En los tres años de instrucción de la pieza separada del caso Palma Arena sobre la Ópera de Jaume Matas nadie ha sabido dar señal de esa maqueta, que costó 60.000 euros al Govern.

Calatrava se comprometió a entregar una reproducción a escala de su palacio de las artes escénicas y otra de la reforma que pretendía introducir en la bahía de Palma, especialmente en la zona del Parc de la Mar, Paseo Marítimo y Moll Vell.

El reconocido arquitecto valenciano pretendió colocar en Palma el mismo proyecto que había diseñado casi dos décadas antes y ex profeso para el lago Lucerna, en Zúrich, pero que finalmente nunca se llevó a cabo en la ciudad suiza.

En septiembre de 2007, el Premio Nacional de Arquitectura reclamó por carta al nuevo presidente socialista Francesc Antich la devolución de la maqueta. Alegó para ello la cláusula firmada en su día con Matas, con la que blindó la titularidad de la miniatura: "Todo el material, esto es, las maquetas y vídeo, son propiedad intelectual y material de Santiago Calatrava", recordó en la misiva al nuevo Govern.

Al menos una de las maquetas no fue enviada a Calatrava, según ha confirmado ahora el Ibisec a requerimiento del instructor.