La propuesta de Més para que el Parlament cree una comisión que investigue lo ocurrido con Son Espases no ha encontrado los brazos abiertos ni en el PP ni el PSIB. Ninguno de los dos partidos aclara si apoyará o no esta propuesta, una indefinición que parece más sorprendente en el caso de los socialistas, cuyo portavoz parlamentario adjunto, Vicenç Thomàs, insistió ayer en que la mayoría absoluta del PP impediría que se llegara hasta el final. "No será el PSIB el que no quiera investigar, pero con una mayoría absoluta del PP debemos ver cuáles son los mejores procedimientos para pedir información", dijo Thomàs tras recordar que en marzo de 2007 el PP votó en contra de crear la comisión de investigación que pedía el PSIB.

Para Thomàs, las declaraciones del PP tras la confesión de la exconsellera popular de Sanidad, Aina Castillo, sobre los amaños para la adjudicación del hospital indican que la actitud de los populares es la misma, puesto que después de conocer esta declaración insistieron en que "toda la tramitación de Son Espases estaba bien hecha".

Thomàs, conseller de Salud del Govern del Pacto (2007-2011), que decidió continuar con Son Espases, afirmó que de haber tenido "conocimiento de cualquier indicio de irregularidad, lo hubiera puesto en manos de la Justicia" pero, a pesar de las sospechas, "sin pruebas no puedes ir a ningún lado".

La portavoz adjunta del PP en el Parlament, Marga Prohens, afirmó que su partido dirá si apoya o no la comisión de investigación cuando Més lo plantee en la Junta de Portavoces y sostuvo que el PP "no tiene nada que esconder". A su vez, afirmó que "quien se pone nervioso cuando oye hablar de una comisión de investigación" es el socialista Thomàs, ya que "mintió" cuando siendo conseller dijo que el modificado de Son Espases supuso un sobre coste de 60 millones de euros cuando "era de 280 millones".

Prohens obvió que lo que investiga Fiscalía Anticorrupción no es este modificado, sino el amaño en el concurso para la construcción del hospital por parte del ex president popular Jaume Matas, cuyas órdenes fueren seguidas por los cargos del PP necesarios para la operación.