El STEI-i ha informado hoy de que interpondrá un recurso de alzada contra la resolución de la Conselleria de Educación por la que se dispone que los centros que no tienen un proyecto TIL aprobado apliquen el de la comisión de coordinación pedagógica hasta que cuenten con uno.

"La Conselleria vuele a imponer con resoluciones el TIL a los centros. Un ejemplo más de su abuso de poder", dice el sindicato en una nota de prensa, en la que informa también de que pedirá la suspensión cautelar de esta resolución.

El sindicato explica que la Dirección general de Ordenación e Innovación que dicta la resolución "no es competente para determinar sobre esta materia" y considera que se trata de "una resolución informativa, no preceptiva y que, por tanto, no tiene contenido aplicable".

Esta resolución se basa en la orden de desarrollo del decreto de tratamiento integrado de lenguas (TIL), impugnada en los tribunales, una vez que ya se ha admitido a trámite el recurso contencioso administrativo presentado por el sindicato, añade el STEI-i, que señala que, además, en pieza separada, se debe tratar la posible suspensión cautelar de esta orden.

"La Conselleria, lejos de intentar un acercamiento de posturas con el colectivo docente, echa gasolina al fuego. El equipo político ha querido forzar la convocatoria y celebración de claustros en los centros docentes, para avalen pedagógicamente los proyectos TIL", insiste el STEI-i.

Concluye calificando todo el asunto de un "fracaso porque los claustros no han dado el aval pedagógico y ahora (la Conselleria) añade esta actuación prepotente y abusiva".

Por su parte FAPA Mallorca, que representa unas 185 asociaciones de padres y madres (APIMA) en la isla, ha expresado en un comunicado su "indignación más profunda por la última actuación de la Conselleria de Educación que, en lugar de trabajar por la recuperación de la estabilidad en los centros, ha reactivado el conflicto educativo con la imposición de una resolución".

Afirma que el rechazo por parte de los claustros a los proyectos lingüísticos que ahora la Conselleria obliga a aplicar tenía el objetivo de "hacer patente la disconformidad con unos proyectos que no presentan garantías pedagógicas para la aplicación en las aulas", por lo que "no se consideran buenos" para los menores.

Los padres, que califican esta nueva resolución de la Conselleria de "prepotente y unilateral", añaden que la misma entra en conflicto con el principio de jerarquía normativa porque el departamento autonómico "actúa en contra de su propia norma", con el de sometimiento a la ley de las administraciones y el principio de autonomía del centro.

En conclusión, FAPA considera que este documento "presenta indicios que generan dudas razonables sobre su legalidad", por lo que expresa su soporte a los claustros y se reafirma en sus convicciones y el respeto por la ley, mientras espera que los tribunales tomen las decisiones oportunas en relación al recurso en contra de la orden de desarrollo del TIL.

Las asociaciones de padres afirman que ven esta situación "con preocupación" porque la educación de sus hijos "está en manos de quien no sabe qué es hacer y, lejos, de poner sensatez, hace y deshace sin otro argumento que imponer su voluntad aunque eso perjudique al alumnado".