El periodista Antonio Alemany, condenado a dos años y tres meses de cárcel, no ingresará finalmente en prisión el próximo lunes, como estaba inicialmente previsto. La Audiencia ha permitido que retrase dicho ingreso, a petición del acusado, hasta el próximo día 1 de septiembre. Por tanto, podrá continuar en libertad los días que le queda de este mes de julio y el próximo mes de agosto.

La decisión la adoptó el tribunal de la Sección Primera de la Audiencia de Palma, después de que a primera hora de la mañana de ayer el periodista, autor de los discursos presidenciales de Jaume Matas, solicitara este aplazamiento. En el escrito que presentó indicaba una serie de circunstancias personales por las que solicitaba un aplazamiento a su ingreso en prisión. Además de razones de salud, alegaba que está realizando una mudanza de domicilio y precisaba de una serie de días para terminar dichas cuestiones particulares. Sobre los motivos de salud, señaló en su escrito que está pendiente de unas pruebas médicas, que ya tiene fecha para hacerlas, y su ingreso en la cárcel dificultaría que se pudieran realizar.

El tribunal decidió resolver dicha petición cuanto antes. Por ello, se solicitó a las acusaciones que se manifestaran sobre el contenido del escrito que había presentado el periodista. Se solicitó que la respuesta se facilitara la misma mañana de ayer. La fiscalía Anticorrupción pidió al tribunal que rechazara dicha petición, al entender que los motivos que alegaba eran insuficientes para aceptar un aplazamiento. El fiscal quería que se cumpliera la providencia que esta misma semana se entregó a Alemany, por la que se le daba un plazo de cinco días para ingresar en la cárcel y este plazo concluía el próximo lunes.

Por su parte, la abogacía de la comunidad autónoma, que también ejerció la acusación en esta pieza del caso Palma Arena, ni siquiera contestó a la petición del tribunal.

Sin embargo, la oposición planteada por la fiscalía fue insuficiente para convencer al tribunal. La Sala consideró que las razones que había alegado el periodista eran coherentes y, además, estaban documentalmente demostradas. Por ello, se aceptó esta propuesta de aplazar dicho ingreso en prisión.

Alemany, que el pasado miércoles acudía a las oficinas de la Audiencia para que le comunicaran su ingreso en prisión, debe cumplir una condena de dos años y tres meses. Tendrá que permanecer este largo periodo de tiempo recluido en un centro penitenciario como consecuencia de la condena impuesta por el Tribunal Supremo.

El periodista fue condenado por una de las piezas del llamado caso Palma Arena. Se le juzgó por los negocios que mantuvo con el expresident Jaume Matas, que le quiso contratar para que elabora sus discursos públicos. A Alemany no le interesó firmar una contratación directa con el Govern, porque ello hubiera supuesto que no podría desarrollar sus otras actividades privadas. Por ello, el Govern buscó una fórmula para ocultar la contratación del periodista, que cobró su sueldo a través de una empresa de publicidad. No solo elaboraba sus discursos, sino que al mismo tiempo elogiaba la figura y actuación del president Matas en sus artículos de opinión que se publicaban en un periódico local.

Gracias a las magníficas relaciones que mantenía con el president, logró también que Matas se comprometiera a colaborar con dinero público en un proyecto empresarial que estaba iniciando. Se trataba de la Agencia Balear de Medios, que obtuvo una subvención de alrededor de medio millón de euros, después de que su oferta hubiera recibido la máxima puntuación. Con este dinero Alemany, además de pagar los gastos de esta agencia, también lo utilizó para financiar un periódico digital. Los jueces le declararon culpable de varios delitos, que tendrá que cumplir en prisión.