Los datos facilitados ayer por el ministerio de Industria sobre el gasto turístico son plenamente confirmados por las patronales isleñas de comercio, restauración y salas de fiesta. Tras un primer trimestre muy negativo en los ingresos, abril registró un impulso al alza gracias a la Semana Santa y a la buena climatología que hizo que cundiera el optimismo ante lo que quedaba de campaña turística.

Pero todas esas expectativas empresariales se vieron defraudadas y mayo registró una fuerte caída en la demanda registrada en las islas. Esa bajada fue tan acentuada que no se duda a la hora de calificar ese mes de "horroroso".