La Guardia Civil ha descubierto a los inmigrantes irregulares llegados hoy a Cabrera en patera gracias a una cámara de vigilancia cuando estaban en tierra, ya que el radar que rastrea la zona no ha detectado la embarcación.

La delegada del Gobierno en Baleares, Teresa Palmer, ha relatado esta tarde que los agentes que vigilan permanentemente el parque nacional han visto sobre las 12.30 horas a tres personas en la parte alta de una cala del sur de Cabrera a través de una cámara de vídeo instalada en el punto más elevado de la isla.

Al sospechar que se trataba de inmigrantes irregulares, los guardias civiles se han desplazado hasta la cala en una lancha pequeña y han comprobado que había otros ocho varones en el lugar.

En total son once hombres jóvenes y en buen estado cuya nacionalidad aún no ha sido determinada, ha subrayado Palmer, quien ha recordado que la gran mayoría de los inmigrantes llegados a Baleares en patera desde 2006 procedían de Argelia.

Antes de la embarcación de hoy, un bote de fibra de 5 metros de eslora propulsado por dos motores, en los últimos ocho años han llegado a las costas del archipiélago balear 27 pateras con 261 inmigrantes a bordo, de los que el 93% eran argelinos.

Palmer, no obstante, ha insistido en que la investigación está abierta y no es posible determinar aún el país de procedencia de los ocupantes de la barca.

La delegada del Gobierno ha destacado la dificultad del "rescate" de los 11 inmigrantes irregulares, que se encontraban en una zona escarpada y "peligrosa".

Finalmente, los detenidos han sido embarcados en la patrullera de la Guardia Civil y llevados al puerto de s'Estanyol, desde donde han sido desplazados hasta el cuartel de Son Rapinya, en Palma.

Allí pasarán la noche y previsiblemente mañana serán puestos a disposición de la Policía Nacional, que gestionará el proceso para su "inmediata devolución la país de procedencia", ha explicado la delegada.

Mañana mismo o el jueves serán trasladados hasta un centro de internamiento de inmigrantes irregulares en la península, desde donde serán devueltos a su país.

Fuentes de la Delegación del Gobierno han indicado que el tiempo máximo de detención en esos centros son 60 días, pero que habitualmente son deportados pasados unos 20 días.

Palmer ha recordado que la de hoy es la primera patera detectada desde julio de 2012. Ese año llegaron a Baleares 33 personas en cuatro embarcaciones y en 2011 fueron 41 inmigrantes en 5 barcos.

Aunque la investigación está en curso, la delegada del Gobierno ha señalado que parece que los 11 hombres detenidos son todos los que viajaban en la patera y que todos tenían la intención de acceder irregularmente a España, sin que uno sea el responsable del transporte del resto.