Los grupos de la oposición, PSOE y Més, no descartan todavía interponer recurso de casación ante el Tribunal Supremo contra la sentencia del TSJB que declaró a José Ramón Bauzá, por 3 votos a 2, compatible en su cargo de president del Govern y como titular de una farmacia en Marratxí. En un primer momento aseguraron que no pensaban recurrir, sin embargo ayer apuntaron que la decisión está en manos de los servicios jurídicos.
Biel Barceló, portavoz de Més, aseguró: "No está descartado, lo que ocurre es que un recurso de casación no implica que otra instancia vuelva a estudiar a fondo si el president es compatible o no. Se trata de un recurso muy limitado que los juristas nos dirán si existen posibilidades para ello". Barceló añadió que su formación también estudiará si políticamente les conviene presentar el recurso. Hay que tener en cuenta que la posible resolución del recurso de casación por parte del Supremo tardará más de un año y lo más probable es que hayan pasado las elecciones. El líder de Més señaló que "el recurso no está descartado, pero hay escasas posibilidades de interponerlo". Pese a ello, Barceló dijo que le gustaría ver la "decisión del Supremo sobre el cambio de criterio del TSJB en dos casos idénticos", en alusión a la sentencia sobre Bauzá y la de la socialista Aina Salom.
Por su parte, la portavoz del PSIB-PSOE, Pilar Costa, también confirmó que los servicios jurídicos socialistas están estudiando las posibilidades que existen de recurrir la sentencia que declara compatible a Bauzá. "Un recurso de casación es un acto muy reglado y hay que analizar la viabilidad", apuntó Costa. La socialista indicó que existen diez días hábiles para presentar el recurso ante el Tribunal Supremo. La líder socialista, Francina Armengol, afirmó ayer que se trata de "una sentencia difícil de entender para los ciudadanos con un cambio de criterio a favor de un señor del PP y en contra de una consellera socialista".
Exigen a Bauzá que rectifique
Por otra parte, Més exigió ayer a Jose Ramón Bauzá que rectifique los calificativos que lanzó contra la oposición, a la que acusó de hacer una política "barriobajera".
La portavoz adjunta de Més en el Parlament, Fina Santiago, aseguró que el jefe del Ejecutivo les dedicó unas "descalificaciones improcedentes, inadecuadas e impropias de un president". La diputada consideró que no deben "pedir perdón por ejercer nuestra responsabilidad".
