Sin rodeos ni medias tintas. Los socialistas de Palma acordaron ayer instar a la dirección federal del partido a apoyar la convocatoria de un referéndum para que la ciudadanía vote si está a favor del mantenimiento de la monarquía, o por contra prefiere una república. Al mismo tiempo, exigen “explicaciones” nada menos que a su propio secretario general, Alfredo Pérez Rubalcaba, por cómo ha gestionado “la crisis institucional abierta tras la abdicación del rey Juan Carlos I y el pacto cerrado con el PP para la aprobación exprés de la ley orgánica que regula la sucesión” del monarca en su hijo, Felipe de Borbón, “sin haberlo sometido a la consideración” de los órganos de dirección.

La propuesta fue aprobada ayer en una reunión del consejo político del PSIB-PSOE de Palma, el máximo órgano de decisión de los socialistas palmesanos a cuyo frente está la exalcaldesa Aina Calvo. De los acuerdos aprobados se deduce una clara crítica velada a Rubalcaba, al que sus correligionarios en Palma acusan de haber maniobrado con el PP para zanjar con celeridad la sucesión del rey Juan Carlos sin tener en cuenta al comité federal, que es el máximo órgano de control del PSOE entre congresos.

El consejo político de ayer también acordó instar ahora a la ejecutiva federal del PSOE en Madrid a convocar un comité extraordinario y urgente “para fijar la postura del partido ante la inminente tramitación en las Cortes de la mencionada ley orgánica”. Dicho de otro modo, para que la formación debata si da o no libertad de voto a los diputados para apoyar la ley que permitirá la proclamación del todavía príncipe de Asturias como nuevo jefe del Estado. En este sentido, el PSOE de Palma no se moja sobre cuál debería ser el sentido del voto de los diputados y senadores del partido por Balears, después de que se haya insinuado la posibilidad de que se abstengan, lo que irritó al aparato que comanda Rubalcaba.

Como era previsible, tras la reunión urgente de la ejecutiva de los socialistas palmesanos el pasado lunes, tras conocerse la abdicación del rey, finalmente el partido en la capital ha aprobado formalmente reclamar a sus “órganos superiores” que “defiendan y apoyen, dentro del marco de la Constitución española, la convocatoria de un referéndum que someta a consulta ciudadana la forma de Estado”.

Quieren consulta vinculante

Por medio de una nota de prensa, el PSOE de Palma informó de que este asunto fue el que suscitó ayer “un mayor debate” en la reunión, teniendo en cuenta que eran cinco las propuestas presentadas.

En otro orden, el consejo político acordó una resolución por la que considera que la consulta convocada en julio para que los militantes elijan al próximo secretario general del PSOE “sí tendría que tener carácter vinculante” de cara al posterior congreso extraordinario que escogerá al sucesor de Rubalcaba.

Los socialistas palmesanos son pues contrarios a que la consulta no sea vinculante, como pretende la dirección estatal del partido, y al mismo tiempo reclaman que el congreso “se celebre bajo la premisa de ‘un militante, un voto’”. Siguiendo el tono crítico, el consejo político quiso lamentar y dejar constancia de que esta solución adoptada in extremis por Rubalcaba no hubiera sido posible sin la “presión de la militancia”.

Siguiendo con el congreso que elegirá al futuro líder del PSOE, los socialistas de Palma aprobaron otra resolución que reclama que el nuevo secretario general “deberá asumir y respetar la elección del candidato a la presidencia del Gobierno de España, mediante el formato de primarias abiertas a militantes y simpatizantes mayores de 16 años de acuerdo con los tiempos y formas previstos con anterioridad a la convocatoria del congreso”, una coletilla explícita para rechazar maniobras en el último momento del nuevo staff que relevará a Rubalcaba para evitar que las bases decidan quién debe ser el contrincante de Mariano Rajoy. La propuesta aprobada incluye pedir también que a partir de ahora se fije el sistema de primarias para elegir a los secretarios generales y urge a “cambiar el modo de hacer política hacia la ciudadanía”, para “construir una hoja de ruta propia” que identifique al PSOE como “alternativa clara de gobierno basada en políticas de izquierda” que permitan al partido “recuperar la confianza de los españoles”.

Finalmente se aprobó fomentar la participación de la militancia en la elaboración del programa electoral a la alcaldía de Cort en 2015 y la creación de grupos de trabajo por áreas.