No es la primera vez que Martínez Espinosa recuerda que España está a la cola en la Unión Europea en cuanto al número de jueces por número de habitantes. Ayer volvió a reiterar que desde el año 2000 la carga de trabajo, en cuanto a números de pleitos civiles, sociales y contenciosos, ha supuesto un aumento del 120%. Sin embargo, la plantilla judicial apenas se ha incrementado en un 25%.

El juez decano de Palma aseguró que si la Justicia fuera una empresa privada, "ya se habría ido al garete". Criticó que la partida que el Gobierno destina a la Justicia solo suponga un 1,15% del Presupuesto General del Estado. Denunció, además, que el presupuesto para los juzgados ha bajado un 2,7% durante este año, mientras que en otras administraciones las inversiones se han multiplicado. Esta situación, a juicio de Martínez, demuestra que la Justicia sigue sin ser una prioridad para los políticos. Criticó que la administración de Justicia tenga que "mendigar" al poder ejecutivo para que destine el dinero necesario.