El juez del caso Nóos, José Castro, ha vuelto a rechazar hoy la petición del sindicato Manos Limpias de ordenar una prueba caligráfica de las firmas de la infanta Cristina e Iñaki Urdangarin en las actas de la empresa Aizoon para verificar su autenticidad.

Castro ha dictado hoy un auto en el que desestima el recurso de reforma planteado por el sindicato, que ejerce la acusación particular en esta causa.

El magistrado también ha dado trámite al recurso de apelación mediante el cual Manos Limpias vuelve a pedir dicha prueba caligráfica, para que las demás partes se pronuncien al respecto en un plazo de cinco días, y posteriormente remitirlo a la Audiencia de Palma para que decida.

Castro rechaza pedir la prueba caligráfica porque considera que practicarla de todas las firmas que se atribuyen a los duques de Palma que figuran en documentos de esta causa haría "caprichosamente inacabable" la instrucción de este caso.

El juez indica que los propios interesados no han puesto en duda la autenticidad de sus firmas ni se han sentido afectados por "hipotéticas falsedades".

Manos Limpias pidió esta prueba por considerar que la instrucción del caso Nóos no puede culminar con "flecos sueltos" que pueden tener consecuencias jurídicas en la vista oral.

"Los imputados pudieran negar la autoría de cualesquiera de las firmas suyas existentes en las actuaciones y por lo tanto ello llevar al absurdo (...) de no poder tener por acreditados y probados determinados hechos ilícitos que en tal caso pudieran quedar impunes", señalaba Manos Limpias en el escrito en el que pidió la prueba caligráfica.