Alfonso Grau, vicealcalde de Valencia y presidente desde hace años de la Fundación Turismo Valencia Convention Bureau, aseguró ayer al juez del caso Nóos que, entre 2004 y 2006, esa entidad contrató a Iñaki Urdangarin para hacer unos foros sobre ciudades sedes de eventos deportivos porque era yerno del Rey y una personalidad capaz de arrastrar al público. Grau, que declaró en calidad de imputado, negó que la Fundación Turismo Valencia sea una entidad pública, lo que haría imposible la comisión de malversación de caudales públicos, uno de los delitos que se le atribuyen.

El veterano político, mano derecha de la alcaldesa del PP de Valencia Rita Barberá, prestó declaración durante poco más de una hora.

Su tardía imputación en el caso Nóos surgió de los testimonios de varios patrones de la fundación, entre ellos conocidos empresarios valencianos. Estos testigos aseguraron que Grau, y el gerente de Turismo Valencia, Salinas, eran los que llevaban la voz cantante a la hora de subvencionar los distintos proyectos para promover la ciudad de Valencia. Los patrones recordaron cómo los dos directivos solían exponerles en una pantalla los proyectos, que ya estaban decididos.

Los mismos declarantes explicaron que la fundación se nutre con aportaciones de empresarios particulares, la Cámara de Comercio, Confederación Empresarial y Feria de Valencia, pero que el grueso de los fondos provienen del Ayuntamiento.

Entre Turismo Valencia y la Ciudad de las Artes y las Ciencias CACSA), dependiente de la Generalitat, dieron 3,150 millones de euros a Iñaki Urdangarin (Instituto Nóos) para organizar tres ediciones de los Valencia Summits.

Decisión colegiada

Grao, por el contrario, manifestó que el apoyo al Instituto Nóos se adoptó en la entidad de manera colegiada.

Según el imputado, el hecho de que los foros vinieran de la mano del duque de Palma sirvió para aceptarlos, dado el prestigio y tirón del yerno del Rey.

Grau recordó que estaba prevista hacer una cuarta edición de los Valencia Summit, la del 2007, pero que se canceló precisamente debido a la salida del esposo de la infanta Cristina del Instituto Nóos.

El primer teniente de alcalde de Valencia se refirió también a cómo se enteró de la iniciativa del duque de Palma. Fue Luis Lobón, también encausado y exsecretario de Turismo de la Generalitat de Valencia, quien le habló de los Valencia Summits.

Según Grau, fue Lobón quien pactó con Nóos el coste de los foros, un precio que no fue discutido, analizado o comparado.

Antes CACSA, a través de su director José Manuel Aguilar (también imputado) negoció el proyecto con Diego Torres, el número dos de Nóos.

Mantener la imputación

Sandra Gómez, abogada de los ediles socialistas de Valencia, manifestó tras la declaración que los argumentos de Grau no le habían convencido. Según la letrada, la Fundación Turismo Valencia es una entidad pública, tal y como ha dictaminado la Intervención General del Estado en un dictamen unido al caso Nóos.

Gómez manifestó la intención de su acusación popular de mantener la imputación del vicealcalde y llevarlo a juicio.

Por su parte, Virginia López Negrete, abogada de la acusación popular Manos Limpias, anunció que piensa incluir a Grau en su escrito de acusación. López Negrete también sostuvo que Turismo Valencia es una entidad de derecho público y que no respetó las normas de contratación en la Administración Pública.

Grau no quiso hacer declaraciones a su salida de los juzgados de instrucción de Palma. El imputado únicamente manifestó que había manifestado todo lo que tenía que decir.

Tampoco quiso aclarar si dimitirá por su implicación en Nóos.