„¿Cuántas vacunas contra el virus del papiloma humano hay comercializadas en estos momentos?

„Dos. Una contiene dos genotipos oncógenos, los virus 16 y 18 del papiloma humano, que son los que entrañan un riesgo más alto de acabar provocando un cáncer de cérvix, de ano, de pene u orofaríngeo (en la garganta, como consecuencia de mantener sexo oral con una persona infectada por el virus), aunque estos dos últimos son mucho más raros.

„¿Y la otra?

„La otra no solo preserva contra los virus 16 y 18, sino también contra los 6 y 11, de bajo riesgo cancerígeno pero que provocan enfermedades en la piel, en concreto los condilomas acuminados o, para que la gente lo entienda, las verrugas genitales.

„¿Qué problemas más comunes causan estas verrugas?

„Son la enfermedad de transmisión sexual más frecuente que hay. Aparecen en los órganos anogenitales y son tratadas por los dermatólogos. Se han convertido en una auténtica epidemia y, pese a que el paciente se someta a un tratamiento dermatológico, el 30% de ellas vuelven a salir una vez que han sido tratadas. La calidad de vida de las personas que las padecen empeora considerablemente, les causa problemas de convivencia con su pareja y dificultades para tener una vida sexual normal.

„Por eso recomienda inmunizarse con la vacuna que contiene los virus del papiloma que provocan estas verrugas...

„Sí, garantiza hasta en un 90% de los casos que no aparecerán estas molestias. No hay que olvidar que el virus del papiloma se adquiere al mantener relaciones sexuales. Por ello, entre el 95% y el 97% de la población está en contacto con él en algún momento. Lo que ocurre es que no se manifiesta en todas las personas. Y el ciclo vital de este virus en el organismo humano dura entre un año y un año y medio.

„¿Hay algunas personas más propensas a desarrollar estas verrugas?

„Sí. Los diabéticos que no tienen controlados sus niveles de glucosa en sangre y las personas inmunodeprimidas. En estos pacientes los condilomas pueden ser no solo más frecuentes sino también más grandes.

„No obstante, la vacuna que se inocula en los programas públicos es la que preserva solo contra el virus que puede provocar el cáncer de cérvix...

„La diana de estos programas es el cáncer de cuello uterino. En estos momentos, públicamente se está vacunando a las niñas cuando cumplen los catorce años, antes de que hayan mantenido relaciones sexuales, y luego se les pone dos recuerdos, a los dos y a los seis meses de la primera dosis. Y desde 2011, a título particular, se puede vacunar a los niños desde los nueve hasta los veintiséis años.

„¿Qué beneficios traerá esta política de vacunación?

„Que con el tiempo, al haber más población preservada, bajarán los casos de cáncer asociados a las relaciones sexuales citados anteriormente así como las verrugas genitales. Como ya ha ocurrido en países en los que estas campañas de vacunación son más antiguas como Australia, Nueva Zelanda, Estados Unidos, Francia, Suecia, Dinamarca...

„¿Qué opina sobre los efectos secundarios que refirieron dos adolescentes valencianas tras ponerles estas vacunas?

„Que fue lo que se denomina un síndrome de conversión, esto es, un intento de llamar la atención para poder exigir más tarde una indemnización o realizar algún otro tipo de reclamación. Una comisión científica demostró que los presuntos efectos secundarios nada tenían que ver con la vacuna.