El Servei de Salut confirmó ayer que desde el mes de marzo ha dejado de suministrar de forma directa y gratuita pañales y otros materiales de parafarmacia a residencias de ancianos privadas y concertadas, aunque matizó que sigue haciéndolo a las residencias de titularidad pública. Preguntado por el motivo de por qué si a los centros públicos y por qué no a los titulares de plazas concertadas por la Administración en residencias privadas, el Servei de Salut diferenció que porque estos últimos son establecimientos de gestión privada.

También confirmó que, hasta el pasado mes de marzo, se suministraba de forma gratuita cuatro pañales por usuario que los precisase y jornada, tres para ser usados durante el día con una capacidad de absorción de 600 mililitros y otro para la noche con un drenaje máximo de entre 900 y 1.200 mililitros. Esta cantidad de pañales, precisaron, fue decidida por un protocolo conjunto adoptado por Farmacia y el antiguo Insalud. Desde el Servei de Salut recalcaron además que esta interrupción del suministro gratuito es consecuencia de la aplicación del real decreto estatal de copago farmacéutico en vigor desde julio de 2012 que no se había aplicado todavía a estos materiales sanitarios suministrados a las residencias privadas.

Pese a que esta situación era un agravio comparativo con los ancianos que también precisan de estos pañales y que viven en sus domicilios, que deben pagar el porcentaje que les corresponda al adquirirlos en las farmacias, fuentes del sector recordaron que los usuarios de las residencias están en ellas por su grado de dependencia y este copago supone una penalización más.