El portavoz adjunto del grupo socialista en el Parlament, Vicenç Thomàs, afirmó ayer que el Gobierno central y el Govern "están facilitando la tramitación administrativa" de las licencias para las prospecciones petrolíferas en aguas de Balears y exigió que el president José Ramón Bauzá "demuestre si está a favor de los ciudadanos o de las empresas" d e una manera clara, lo que significa que, además de medidas políticas, debe emprender "medidas jurídicas si es necesario, como está haciendo Canarias". El presidente canario, Paulino Rivero, solicitará autorización al Gobierno central para celebrar un referéndum sobre las prospecciones autorizadas a pocos kilómetros de Lanzarote y Fuerteventura.

El PSOE balear pedirá hoy en el pleno del Parlament explicaciones al Govern sobre su postura, con el fin de conocer el grado de compromiso real a la hora de parar los proyectos de prospecciones previstos en aguas de Eivissa. A las cuestiones que planteen los socialistas se unirán las preguntas que también formulará Més, que ayer recordó que hasta ahora sus propuestas no han obtenido respuesta. Fina Santiago, diputada de Més. recordó que el PP apoyó en su momento una propuesta de Pere Sampol (PSM), cuando este era senador autonómico, en contra de estos proyectos y que sin embargo "ahora, que es cuando tiene que votar en contra, parece que tiene dificultades para hacerlo".

La portavoz parlamentaria popular, Mabel Cabrer, resaltó que la postura del Govern y del PP está clara en lo que se refiere al rechazo a estas prospecciones. En este sentido, resalto que el conseller de Agricultura, Medio ambiente y Territorio, Biel Company, viajará hoy a Bruselas para entregar los dos informes de la Comisión Balears de Medio Ambiente con el fin de lograr que la UE adopte una postura contraria a estos proyectos.

Cabrer consideró que las declaraciones de los socialistas son un intento de "tapar sus vergüenzas y buscar culpables en el PP", cuando "los únicos responsables son ellos mismos", ya que fue el Gobierno socialista de José Luís Rodríguez Zapatero el que aprobó los permisos para los sondeos en diciembre de 2010 "con el consentimiento del anterior Govern de Francesc Antich (PSOE), que ni mostró disconformidad lo impugnó".

"No partimos de un punto cero, sino que lo hacemos con una desventaja porque los permisos ya están concedidos", dijo la portavoz popular quien insistió en que "el Govern hace y seguirá haciendo lo posible y lo imposible para evitar que se lleven a cabo estas prospecciones". Por ello, confió en que la oposición se sume hoy en el pleno del Parlament a la declaración institucional que presentarán los populares para que la Cámara balear apruebe por unanimidad instar al ministerio de Industria a que paralice estos proyectos.

"Los socialistas deberían asumir sus responsabilidades y colaborar", dijo Cabrer quien afirmó que el pasado martes no fue posible un acuerdo en el Parlament sobre este asunto porque el PSOE sentía "la necesidad de tapar sus vergüenzas, pero ahora debería estar a la altura de las circunstancias". El socialista Vicenç Thomàs recordó ayer que, a pesar de lo aprobado por el Gobierno central, lo cierto es que "no existe ninguna autorización dada ni ningún derecho consolidado para hacer las prospecciones, ya que están pendientes de las autorizaciones pertinentes. Thomàs resaltó que quienes pueden evitarlas son los populares, para lo cual es necesario "la voluntad política y el convencimiento del PP".

El Gobierno de Zapatero aprobó en diciembre de 2010 autorizar a la empresa Cairn Energy a realizar prospecciones petrolíferas entre la costa valenciana y la balear, a unos 40 kilómetros de Eivissa, con el fin de estudiar la rentabilidad que tendrían las extracciones en esta zona. En noviembre, ya con el Govern de Bauzá, el Parlament aprobó por unanimidad una proposición no de Ley del PSOE por la que se instaba al Gobierno central a paralizar las prospecciones. En enero de 2012 el ministro de Industria, José Manuel Soria, mostró a los parlamentarios ibicencos en el Congreso y el Senado, Enrique Fajarnés y José Sala, respectivamente, su rechazo a estos proyectos. Sin embargo, en la convención nacional del PP celebrada a principios de este mes, Soria se mostró a favor de esta iniciativa con el fin de "recuperar la industria", mientras el president Bauzá dejaba clara su oposición a la postura del ministro.