El sábado 8 de febrero el juzgado de instrucción 8 de Palma estará en funciones de guardia y tendrá que tomar declaración a los detenidos que ese día le pongan a su disposición Policía, Guardia Civil y Policías Locales del partido judicial.
Las previsiones pasan por dejar el menor número de detenidos para esa mañana, con lo que muchos serán llevados al juzgado de guardia el viernes por la tarde o conducidos el domingo. Los que no haya más remedio que pasarlos el sábado serán trasladados desde Comisaría a los calabozos de Vía Alemania a las siete de la mañana, tres horas antes de que llegue la duquesa de Palma.
La declaración de doña Cristina puede durar cinco o seis horas o más. Durante todo ese tiempo, el patio trasero de los juzgados, lugar donde entran y salen detenidos, presos y puestos en libertad estará repleto de periodistas y de policías.
Durante las dos declaraciones anteriores de Urdangarin apenas hubo trasiego de detenidos y tampoco muchas personas accedieron al juzgado de guardia para poner denuncias o por otras incidencias. Los funcionarios del juzgado de guardia sí podrán usar teléfonos móviles.
