El presidente del Govern, José Ramón Bauzá, y los de los cuatro Consells insulares escenificaron ayer la puesta en marcha de "un frente común" para impedir las campañas de búsqueda de petróleo cerca de la costa de Eivissa y de Balears. En la cuarta Conferencia de Presidentes de esta legislatura, la primera que se celebra en Eivissa, Bauzá dijo que "sin ningún tipo de duda" hará valer, como barón regional del PP, su peso ante la cúpula de su partido para intentar evitar las prospecciones, aunque recordó que ya lo hizo hace tiempo tanto él como su homólogo en la Comunidad Valenciana, Alberto Fabra. "Hace más de un año. No es ninguna noticia nueva. Haré todo lo necesario para evitarlo", subrayó el presidente.

Para sellar su compromiso, el jefe del Ejecutivo autonómico bajó al vestíbulo de la sede del Consell ibicenco para firmar sus alegaciones contra el estudio de impacto ambiental del proyecto de Cairn Energy en el Golfo de Valencia, que se sumarán a las más de 20.000 recogidas hasta ahora por la Aliança Mar Blava. Lo mismo hicieron los presidentes de los Consells de Mallorca y Menorca, María Salom y Santiago Tadeo, que ayer manifestaron su "solidaridad" con Eivissa en contra de la campaña sísmica.

Bauzá recalcó "el rechazo contundente" de la Comunidad Autónoma contra las prospecciones y recordó que "el petróleo de las islas es el turismo". "No hay que ir a buscar petróleo porque ya lo tenemos. Lo defenderemos donde sea y en las máximas instituciones. No podemos poner en riesgo nuestra economía ni la protección del medio ambiente", dijo, al tiempo que señaló que ya ha trasladado al Gobierno su oposición a los proyectos previstos y que el conseller balear de Medio Ambiente, Gabriel Company, acompañará a los presidentes de Eivissa y Formentera el 11 de febrero a Bruselas para entrevistarse con el comisario europeo de Medio Ambiente, Janez Potocnik.

"Creemos que lo que es malo para Eivissa también lo es para Mallorca", dijo por su parte la presidenta del Consell de Mallorca, María Salom (también del PP).

Ninguna medida en concreto

En todo caso, al ser preguntado sobre qué iniciativas se van a adoptar para evitar las prospecciones, el presidente del Govern no especificó ninguna medida concreta, salvo reiterar su "absoluto rechazo". Sobre la posibilidad de acudir a los tribunales, Bauzá dijo que hay que "dar un paso tras otro": "Primero hay que poner de manifiesto nuestra actuación en bloque, unánime, y, obviamente, no descartamos cualquier tipo de iniciativa".

Cabe tener en cuenta que el pasado mes de julio el ministro canario de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, aseguró en una reunión en el Consolat que las prospecciones no tenían marcha atrás porque, de lo contrario, el Gobierno estaría "prevaricando".

En otro orden, el grupo ecologista GOB alertó ayer de los riesgos y el grupo Més presentó alegaciones contra las prospecciones y propugna una declaración negativa "por los elevados impactos ambientales y socioeconómicos que generará y por el unánime rechazo social que ha provocado". "El hecho de ser unas islas turísticas implica que nuestro desarrollo económico es incompatible con las prospecciones petrolíferas ante nuestras costas", afirmó el líder econacionalista Biel Barceló, mientras que el diputado David Abril exigió al Govern que pase de las declaraciones "a los hechos". Junto a ellos compareció el eurodiputado Raül Romeva, quien atribuyó al Gobierno central "la responsabilidad directa de permitir o detener el proyecto de Cairn Energy", y advirtió de que "si no se logra parar este proyecto, el Mediterráneo se podrá llenar de prospecciones que afectarán a todas las actividades económicas, sociales y ambientales de manera irreversible".