La empresa propiedad de la UGT balear y dedicada a la promoción de vivienda protegida se ha visto obligada a presentar un preconcurso de acreedores tras alcanzar unos impagados por valor de casi medio millón de euros, según ha admitido su administrador, Miguel Angel Carlos. La compañía Habitatges i Serveis de ses Illes Balears cuenta en este momento con una promoción inacabada de 60 pisos que pensaba destinar al alquiler y otra de 20 en venta y de los que ya se han adquirido casi la mitad.

En el caso del mayor de estos proyectos, un edificio con 60 viviendas y las correspondientes plazas de aparcamientos y trasteros, situado entre las calles Jeroni Pou, Pare Guillem Vives y Antoni Ribas de Palma, su construcción está prácticamente concluida (solo queda pendiente un 3% de la misma, según Carlos), aunque también se está a la espera de la instalación de un transformador por parte de Endesa. A ello hay que sumar un edificio con 20 pisos en la calle Primavera, de los que según el administrador ya están vendidos "ocho o nueve".

El problema, según Miguel Angel Carlos, radica en que inicialmente estaba previsto vender también las 60 viviendas protegidas del primer proyecto, pero un cambio en la normativa sobre subvenciones para los adquirentes hizo que muchas de las familias interesadas en la compra optaran finalmente por retirarse. Por ello, se optó por tramitar el que se pudieran alquilar por unos precios que iban de los 90 a los 300 euros mensuales, una vez concluida su edificación

Pero esa falta de ingresos, al pararse las ventas, es la que ha dejado a varios proveedores sin poder cobrar desde hace meses. La opción que se ha tomado desde la promotora de UGT ha sido la de presentar a finales del mes pasado un preconcurso de acreedores, para evitar que "los nervios" entre las firmas a las que se adeudan más de 400.000 euros les llevarán a instar un concurso necesario de acreedores, lo que dejaría la salida a este problema en manos de un juez.

Porque según Miguel Angel Carlos, la solución a este contencioso esta próxima. Desde hace meses se está negociando con otras empresas promotoras el que alguna de ellas adquiera la totalidad de los inmuebles que siguen sin venderse, dado el interés que actualmente existe en torno a la vivienda protegida en régimen de alquiler. El administrados de la empresa de la UGT afirma que este acuerdo puede quedar cerrado este mismo mes o en enero a más tardar, y asegura que el dinero que se perciba por estos inmuebles se dedicará a saldar la deuda con los proveedores.

Instar el concurso

El argumento de Miguel Angel Carlos de que los "nervios" podrían provocar el que los acreedores optaran finalmente por instar el concurso necesario se ha visto respaldado por los hechos. El pasado viernes, cinco empresas y un particular presentaron la citada solicitud en los juzgados de los mercantil de Palma, alegando una deuda de 410.440 euros, de los que 366.494 se califican de "indiscutibles".

El temor de estos acreedores es precisamente que la promotora de UGT se desprenda de esos pisos sin saldar su deuda, algo que Miquel Angel Carlos niega tajantemente y afirma que se abonarán las cantidades pendientes.

El haber presentado previamente el preconcurso de acreedores bloquea durante los próximos cuatro meses la posibilidad de que se inste el concurso necesario, y da tiempo a los responsables de Habitatges i Serveis de ses Illes Balears a que cierren el acuerdo de venta de los inmuebles sin que se esté bajo la supervisión de un juez. Hay que tener en cuenta que el administrador de esta empresa es de la opinión de que este tema quedará cerrado en el plazo máximo de cuatro o cinco semanas

En cualquier caso, Miguel Angel Carlos afirma que los activos en manos de esta promotora propiedad de UGT tienen un valor estimado de 14 millones de euros, lo que supone una garantía para los que tienen pagos pendientes. Sobre el futuro de la promotora, su administrador desconoce si UGT optará por liquidarla o si la mantendrá sin actividad a la espera de reactivarla en el futuro.