Hace 20 meses que la Guardia Civil iba detrás de una banda mafiosa rusa que se había establecido hace unos cuatro años en Mallorca, dirigida por el ciudadano moscovita Alexander Ivanovich Romanov. Se trata de un empresario, condenado en su país, que lideraba la organización criminal denominada Taganskaya, que se dedica al blanqueo del dinero obtenido en Rusia a través de la extorsión a empresarios.

Este ciudadano, de unos 50 años, fue una de las ocho personas que ayer fueron detenidas en el transcurso de la denominada operación Dirieba, desarrollada en Palma y Calvià. Además del empresario, se ha detenido a su esposa, a sus suegros, su abogado de confianza, su asesor fiscal, un empresario que les habría facilitado facturas falsas y una testaferro.

Alexander Ivanovich Romanov fue arrestado a primera hora de la mañana de ayer en su lujoso chalé de Peguera. La vivienda está situada junto al hotel Mar i Pins, que fue adquirido hace tres años por la organización, que financió la operación a través de fondos procedentes de la mafia rusa. El hotel, ubicado en primera línea de mar, lleva varios años cerrado. El propietario estaba llevando a cabo una completa reforma, presupuestada en varios millones de euros. El establecimiento fue precintado ayer por la Guardia Civil, que durante toda la jornada realizó un completo registro en la vivienda de lujo que ocupaba Alexander Romanov y su esposa. Esta casa está situada en primera línea de la costa, con entrada privada al mar. Su valor ronda los tres millones de euros. Además de una completa colección de cuadros, el supuesto mafioso guardaba en su casa dinero en metálico, repartido entre dólares, euros, rublos y libras esterlinas. Él y su esposa, Natalia Vinogradova, estuvieron presentes en el registro en su domicilio, que se prolongó durante varias horas. Ya de noche fueron conducidos a los calabozos de la Comandancia de la Guardia Civil, donde se reunieron con el resto de detenidos.

El grupo mafioso que lideraba este ciudadano ruso se dedica sobre todo a la extorsión. Con métodos violentos consiguían apropiarse de empresas con dificultades económicas que llevaban después a la quiebra tras vaciarlas de activos. Cuando el empresario se negaba a vender, los mafiosos le amenazaban y si no logran que esta extorsión tuviera efecto, se dedicaban a presionar a los clientes y a los proveedores hasta que consiguían su propósito de quedarse con la empresa.

No es la primera vez que se localizan inversiones económicas en Mallorca financiadas con el dinero ilegal que obtiene la mafia rusa. Pero sí es la primera ocasión que se constata que estos grupos criminales invierten su dinero en negocios turísticos de Mallorca. El empresario ruso, a través de una testaferro, adquirió en 2010 el hotel Mar i Pins, que dirigía personalmente, pero a través de testaferros. No hay constancia de que esta organización mafiosa hubiera cometido delitos violentos en España. Alexander Romanov huyó de su país tras ser condenado a raíz de una estafa de unos seis millones de euros. En su refugio se hacía pasar por un adinerado hombre de negocios.

Este grupo mafioso disponía de una importante red de colaboradores, que le ayudaban a invertir el dinero obtenido en Rusia en proyectos legales en España. La principal inversión se había realizado en este hotel, que hace unos años tuvo que derribar una parte construida porque estaba invadiendo un área de costa.

Los investigadores también detuvieron ayer al más estrecho colaborador del mafioso ruso, el abogado mallorquín Amado Jaime Sastre. El letrado dirige el bufete Sastre & Asociados, ubicado en la plaza Alexander Jaume, situada junto a Vía Sindicato. El despacho fue ayer registrado durante varias horas, con la presencia de su propietario, que anoche fue trasladado a los calabozos de la Comandancia. Los investigadores sospechan que este abogado es el principal asesor en España del supuesto mafioso y era quien controlaba el resto de ayudantes que intervenían en la operación para blanquear el dinero de la mafia. Se cree que el letrado detenido era quién decidía las inversiones más importantes. Los investigadores han comprobado que el asesor utilizó una empleada de su despacho para que actuara como testaferro y lo hizo para que el nombre de su cliente, Romanov, no figurara en los documentos y no se le pudiera relacionar con esta operación económica. Además de su despacho, la Guardia Civil también registró el domicilio de Amado Jaime Sastre, ubicado en la barriada de Cala Major. La vivienda fue precintada por los investigadores.

Esta operación policial, que ha realizado el Grupo de Información de la Guardia Civil de Palma, en coordinación con la Unidad Central, la ha dirigido la juez Carmen González, del juzgado de instrucción número 12 de Palma, junto a la fiscalía Anticorrupción. A falta de que se perfilen las acusaciones concretas, estos detenidos están acusados de los delitos de blanqueo de capitales, fraude a la Hacienda Pública y falsedad documental. Tampoco se descarta que pueden ser acusados de un delito contra el derecho de los trabajadores, revelación de secretos, coacciones y tráfico de influencias.

Además de la Guardia Civil, en la investigación de la operación denominada Dirieba participan policías extranjeros, que han colaborado en dar información sobre las actividades de esta organización criminal.

También han participado técnicos de la Agencia Tributaria, que se han encargado de analizar las operaciones económicas que esta banda mafiosa realizó en Mallorca.