El Consell de Mallorca está colocando la señalización de unos 300 kilómetros de vías secundarias para mejorar la seguridad de los ciclistas. El objetivo es alertar a los automovilistas de la presencia de los practicantes de este deporte para que tomen precauciones. Esta medida, junto a otras que están en proyecto, es el resultado de la Comisión de Seguridad Vial de los Ciclistas compuesta por la institución insular y la Federación Balear de Ciclismo. En el día de ayer se presentaron las iniciativas emprendidas por esta comisión encabezada por el vicepresidente del Consell, Joan Rotger, y por el vicepresidente del estamento federativo, Xisco Lliteres.

La señalización se ha colocado en las principales salidas de los pueblos y en las carreteras secundarias más transitadas de la isla. Los indicadores alertan a los conductores de la necesidad de circular a más de 1,5 metros de las bicicletas. Asimismo, el vicepresidente Rotger se comprometió a que la institución insular incluirá la reforma de los arcenes en las obras viarias que realice, así como el reforzamiento del firme de las carreteras sa Pobla-Pollença, carretera vieja de Palma a Sineu y la Sóller-Biniamar.

Las principales carreteras que se están señalizando para mejorar la seguridad de los ciclistas son la Felanitx-Porreres, la de Cap Blanc, que conecta Llucmajor con Palma, la Petra-Santa Margalida, la Palma-Sineu, la Manacor-Son Serra de Marina, la Llucmajor-Algaida, sa Pobla-Port d´Alcúdia, Santa Maria-Esglaieta, sa Pobla- Pollença, la carretera de Formentor y la del Coll de Sóller.

Xisco Lliteres destacó la importancia del ciclismo como desestacionalizador del sector turístico. Apuntó que este deporte reporta suculentos ingresos para Mallorca. "La colaboración entre Consell y Federación en el seno de esta comisión es fundamental para mejorar la seguridad de los ciclistas. Este deporte consigue traer a Mallorca unos 100.000 turistas al año", aseveró el vicepresidente de la Federación Balear.

La dirección insular de Deportes ha puesto en marcha una campaña en los colegios mallorquines con el objetivo de concienciar a los más jóvenes para que aprendan a respetar la circulación de los ciclistas en las carreteras de la isla. Esta campaña incluye el reparto de pegatinas con el logo donde se indica la necesidad de respetar la distancia de seguridad entre los vehículos y las bicicletas.

Proyectos de futuro

La Comisión de Seguridad Vial para Ciclistas se ha marcado varios importante proyectos de futuro. El más importante es la iluminación del túnel de Monnàber (Escorca) que accede al Puig Major que tiene un presupuesto de 430.000 euros. Se deben instalar placas fotovoltaicas para dar luz en el interior del túnel con el objetivo de que los ciclistas puedan circular por su interior. Hasta el momento, debido a la falta de visibilidad, era del todo imposible que los deportistas del pedal pudieran rodar por esta vía.

Asimismo, se instalarán señales verticales en la totalidad de carreteras de la isla para informar de la distancia obligatoria entre los coches y los ciclistas. A todo ello se debe unir la mejora de los arcenes en unas cinco carreteras isleñas, con la finalidad de crear una vía por donde las bicicletas puedan circular con mayor seguridad. También se realizarán campañas entre los turistas.