El Govern aprobó ayer la concesión de una subvención directa de 400.000 euros a Cruz Roja para su programa de retorno voluntario a sus países de inmigrantes extracomunitarios que se encuentren en situación de especial vulnerabilidad social y que sean residentes en Balears. Según explicó la portavoz del Govern, Núria Riera, se trata de un "plan piloto" incluido en el Plan Anual de Cooperación para este año.

El programa de regreso voluntario tiene como objetivo ayudar a integrarse en el mundo laboral de sus países de origen a los inmigrantes que "tengan problemas de integración social y deseen volver ya sea por motivos personales o por otra circunstancia", según informó el Govern. Aunque Riera no se refirió a la crisis, la situación económica ha hecho aumentar el número de inmigrantes que se plantean regresar a sus países.

Según los datos de la subdirección general de integración de inmigrantes, del ministerio de Empleo, en los últimos cinco años la única entidad que ha gestionado programas de regreso voluntario de atención social de inmigrantes en Balears, financiados por el Ministerio, ha sido Cruz Roja.

Por otro lado, el Govern acordó subvencionar con 150.000 euros a la Associació d´Amics del Poble Saharaui para su actuación de mejora de las condiciones de vida de la población en los campamentos de refugiados del Tinduf y la sensibilización de la población balear. Además, el Govern aprobó conceder 30.000 euros a la entidad Escola en Pau para su programa de acogida humanitaria ´Madrassa 2013´, por el que familias de Balears acogen a niños de los campamentos de refugiados del Tinduf para que estudien en las islas.

Además de estos acuerdos, el Govern autorizó al Fogaiba a ampliar con 393.486 euros la convocatoria de este año de ayudas destinadas a aumentar el valor añadido de los productos agrarios, por lo que los fondos totales que se dedicarán en 2013 ascenderán a 1.573.723 euros.

Asimismo, el Ejecutivo aprobó el gasto correspondiente a los convenios entre la conselleria de Salud y los consells insulars para atención a los drogodependientes, por un importe de 1.386.426 euros, de los que 1,1 millones corresponden al Consell de Mallorca.