El alcalde de Palma, Mateo Isern, reclamó de nuevo ayer que se inicie "cuanto antes" y "sin condicionamientos previos" el diálogo entre los representantes de los profesores en huelga indefinida contra el Tratamiento Integrado de Lenguas (TIL) y el Govern. "Los grandes perjudicados de esta situación son nuestros hijos", aseveró el alcalde, aunque subrayó que este asunto es ajeno a sus competencias. "Es necesario que el diálogo se vuelva a poner en marcha, no debería haberse interrumpido", y para que las negociaciones fructifiquen sería preciso que los huelguistas no impongan como condición inexcusable la retirada del decreto de trilingüismo, reflexionó Isern. Para el alcalde, "asuntos como este, decisivos para una sociedad", deben abordarse con voluntad de consenso, aunque eludió pronunciarse sobre si el Govern debió dialogar antes de imponer el TIL. No obstante, indicó que "un gobierno no puede dejar de ejercer sus funciones en base a condicionamientos de colectivos, por muy importantes que sean".