El Govern sigue parapetado en que la atención sanitaria urgente a inmigrantes irregulares en Balears es gratuita, pero la realidad le supera. El pasado 10 de mayo trascendió el caso de otro inmigrante ´sin papeles´, octogenario y enfermo de cáncer, al que el Hospital de Inca le exigió dinero para poder ser atendido en Urgencias por una fractura de cadera. El paciente se vio obligado a dar sus datos y firmar un compromiso de pago, y está a la espera de que le llegue la factura.

El caso, desvelado con documentos probatorios por voluntarios de la ONG Metges del Món-Balears, se sumó a la denuncia del amigo de Alpha Pam, el senegalés de 28 años muerto el pasado 21 de abril por una tuberculosis no tratada, según la cual al joven se le exigió pagar en Urgencias del Hospital de Inca para hacerse una radiografía y desistió supuestamente por falta de recursos económicos.

Compromiso de pago previo

Diario de Mallorca publicó semanas atrás un formulario que se entregaba en el departamento de admisión de Urgencias del Hospital de Inca a los inmigrantes irregulares a los que el Gobierno retiró en septiembre la tarjeta sanitaria, advirtiéndoles de que les cobraría la visita y todos los gastos médicos derivados.

Hace dos meses y medio, un subsahariano octogenario, que lleva más de diez años residiendo en Mallorca ´sin papeles´ y que padece un cáncer intestinal, acudió a Urgencias del hospital inquer. Se había fracturado la cadera después de una caída accidental. Para admitirle, en el hospital le dijeron a su hija que previamente el anciano debía firmar un compromiso de pago, para emitirle después la factura.

El paciente accedió a pagar, y rubricó el documento. Estuvo unos diez días ingresado, durante los cuales "reiteradamente personal del departamento de admisión iba a la habitación a recordarle que debía pagar antes de que le dieran el alta", explican voluntarios de Metges del Món. Según denuncian, el hospital no solo requirió el pago por atender la fractura ósea, sino también una inyección de unos 600 euros de coste que deben administrar al enfermo cada seis meses para tratarle el cáncer.

Ajeno a los nuevos escándalos que van aflorando, la nueva portavoz del Govern, Núria Riera, afirmó que la muerte del senegalés por tuberculosis al que se había dejado sin tarjeta sanitaria y al parecer se le exigió el pago en Urgencias "es un caso puntual".

Este diario pidió hablar con el director general del IB-Salut, Miquel Tomàs, o en su defecto con el director gerente del Hospital de Inca, Fernando Navarro, para que explicaran por qué se exige dinero en el centro a los ´sin papeles´ que demandan atención sanitaria urgente, lo cual es ilegal. Ninguno de los dos quiso dar la cara, y desde el IB-Salut se limitaron a explicar que ayer mismo Tomàs se reunió con todos los responsables de admisión de Urgencias "y dejó bien claro" que los extranjeros sin permiso de residencia tiene derecho a la atención en casos de urgencia y no se les puede cobrar por ello. Para el resto de explicaciones, el IB-Salut remitió a lo dicho por la portavoz del Govern.

Riera aseguró que en la sanidad balear se respeta el decreto estatal, y anunció que el Govern acabará la investigación abierta sobre la muerte por tuberculosis del joven senegalés, y estudiará después si toma medidas contra los posibles responsables de la falta de tratamiento a este inmigrante.