Alberto Garzón (Logroño, 1985) es economista y una de las figuras emergentes de la izquierda a raíz del movimiento del 15-M. Afiliado a Izquierda Unida desde hace una década, consiguió un escaño por Málaga al Congreso en las últimas elecciones generales. Autor del libro La gran estafa, hoy culmina en Mallorca una gira por Balears.

-Para que se haga cargo del tipo de entrevista: "¿Soportaría usted un escrache en su domicilio?"

-Lo soportaría. El escrache es una actividad pacífica, que busca al agresor indirecto de situaciones que han generado violencia. No se justifica que me lo hagan, pero va con mi cargo público, que puede ser contestado.

-¿Ahora van a robarnos ustedes los pisos que tanto nos ha costado heredar?

-El decreto andaluz sólo afecta a los pisos que heredan los bancos por desahucio o las inmobiliarias, y consiste en recuperarlos para los ciudadanos. Las personas individuales pueden estar tranquilas.

-¿En Andalucía gobierna el alcalde de Marinaleda?

-Es un diputado más, fuera de la primera línea política. En Andalucía hay un cogobierno de izquierdas y, aunque en el decreto sobre viviendas se nota la mano de IU, lo ha conseguido la calle.

-Y se lo ha apropiado el PSOE.

-El PSOE es un partido oportunista, por evidencia histórica. Sin IU no se hubiera aprobado esta medida, que los socialistas no propusieron jamás.

-¿Veremos a Izquierda Unida por delante del PSOE?

-Obviamente lo deseo, pero también lo creo. En intención directa ya le superamos en la última encuesta de Metroscopia. Asistimos a la ruptura del sistema y una de sus ramificaciones puede ser que IU sea incluso la primera fuerza, como ocurre en Grecia con Syriza.

-IU sube, pero Cayo Lara no emociona.

-La crisis no salva a ninguno de sus protagonistas, pero Cayo Lara es un político de referencia y lo importante no son las personas, sino los programas.

-¿Está hablando por un ´iPhone´?

-Efectivamente, es mi iPhone del Congreso. Es fruto de un pacto de la mayoría absoluta del PP con Apple, aunque hemos reclamado otro más barato, de software libre y de una empresa que pague impuestos en España.

-¿Cuánto declarará a Hacienda?

-Está todo transparente en mi página web. Ahí constan mis ingresos, de los que desgravo el 30 o 40 por ciento que dono porque mi sueldo me parece excesivo.

-El Congreso es un recinto libre de paro.

-Peor aún, es un espacio responsable en gran medida de que haya paro en el exterior.

-IU tendrá que salir en defensa de Jorge Verstrynge, hijo predilecto de Fraga.

-Su implicación actual merece nuestro respaldo. Hay que valorar a las personas en función de lo que hacen, no de lo que fueron.

-¿"Marxista leninista" significa que simpatiza con Corea del Norte?

-En absoluto. Corea del Norte no es mi modelo, pero en España tampoco hay democracia. El marxismo es una herramienta muy útil para entender el capitalismo, pero yo creo en el sistema heredado de la Ilustración.

-¿El Rey es un elefante herido?

-La monarquía es una figura anacrónica y herida de gravedad, que tiene los días contados. Sus miembros han hecho méritos para que llegue la República.

-¿A qué ventanilla hay que dirigirse para que te contraten en Catar?

-A la de un Rey clientelista, que favorece a los suyos y habla sin parar con la dictadura teocrática de Catar.

-No debería criticar a Felipe González, intocable para la izquierda.

-Es intocable para personas que lo han idolatrado, pero trabaja para la multinacional Gas Natural, que destroza el medio ambiente en Doñana. González no es hoy de izquierdas.

-Hasta hace poco, Garzón era otro.

-No somos familia con el juez, que se ha convertido en el único condenado de momento por el caso Gürtel, lo cual da idea de las deficiencias del país. Junto a esto, Garzón tiene tachones impresionantes en la represión, como el cierre de periódicos.

-¿Es posible una lista electoral cuyos números uno y dos se apelliden Garzón?

-Yo no aprobaría la inclusión del juez Garzón en las listas de IU. Su carrera política ya ha llegado al final, es tiempo de nuevas personas.

-Se pone usted duro en twitter: "No me llames Albertín, maja", "informaos antes".

-En ocasiones, por la tensión. La brevedad del mensaje puede malinterpretarse, y hay gran cantidad de gente que va a twitter a molestar.

-¿Cuántas veces al día le dicen que "ya cambiarás"?

-Bastantes, me insisten en que me haré conservador. Es grosero y además inexacto. Beiras y Anguita son mis referentes, y en lo nuclear no han cambiado.

-¿Es usted el nieto de José Luis Sampedro, o sólo su sucesor?

-Soy una de las personas que nos declaramos discípulos de Sampedro, catedrático de Económicas en la Complutense donde yo estudié. Heredamos su proyección moral y política, su dignidad.