La venta parcial de la compañía aérea Orbest y las agencias de viajes Vibo por parte de Orizonia al grupo Barceló salvaría unos 800 puestos de trabajo, 120 en Baleares, han asegurado representantes de los sindicatos USO y CCOO, que han apuntado a "maniobras" en la crisis del grupo turístico.

Así lo han expresado los sindicalistas tras la reunión que han mantenido con la directora general de trabajo del Govern balear, Joana Maria Camps, que se ha comprometido con los empleados de Orizonia que se verán afectados con el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) y el concurso de acreedores que prepara la empresa a ayudarlos en todo lo que sea de su competencia.

Se prevé que de las agencias de viaje de Vibo solo se salven unos 50 puestos de trabajo en las islas, y otros 70, que correspondería a auxiliares de vuelo y pilotos, con la venta parcial de la aerolínea Orbest a Barceló.

Con estos datos, según la responsable de Transportes de CCOO en Baleares, Carmen Díaz, unos 800 de los 1.000 trabajadores de las islas de Orizonia se quedarían en la calle.

Además, los trabajadores, que están pendientes de la mesa de negociación del ERE en Madrid, han apuntado a una "estrategia" de parte de la dirección de la empresa y de las compañías interesadas en su compra, Globalia y Barceló, para quedarse solo con las partes que les conviene sin tener en cuenta cómo afectará a los 5.000 empleados de Orizonia.

"Está claro que hay mucho usurpador y sinvergüenza en este sector porque no es normal lo que ha pasado durante la semana", ha apuntado el coordinador de transportes de USO en Baleares, Jaume Grimalt, en alusión al hecho de haber pasado de un posible comprador (Globalia) a otro interesado solo en dos empresas del grupo (Barceló).

Grimalt ha calificado de "una falta de ética absoluta" que Barceló pretenda mantener a los trabajadores de parte de Orbest y Vibo con un 20 % menos de salario y sin el reconocimiento de la antigüedad.

"Pasamos de una compra a una falsa compra; de un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) a un ERE extintivo. Está claro que alguien está jugando sucio y muy sucio", ha insistido Grimalt.

En este sentido, Díaz se ha referido a una posible "estrategia" y "maniobra" en la negociación de Orizonia.

"Creemos que hay elementos que nos resultan especialmente sospechosos (...) de que cada empresa se ha llevado lo que le interesaba y se ha quitado un competidor de golpe y porrazo. Hay cosas que no nos están gustando de cómo se está actuando", ha precisado la representante sindical.

Además, Díaz ha explicado, en relación a la venta de la mitad de Orbest, que todo lo que hay alrededor de la aerolínea, operaciones, administrativos y servicios centrales, será desmantelado para subcontratar gente en Madrid o Portugal porque los actuales empleados no podrán moverse geográficamente por su salario.

En el encuentro con Camps los trabajadores han solicitado la intervención del Govern en este asunto y la directora de Trabajo les ha ofrecido agilizar en todo lo posible la tramitación del ERE en cuanto este llegue a producirse a través de gestiones directas con el Ministerio de Empleo y Economía.

Ha prometido también que facilitará la recolocación de los trabajadores de Orizonia a través del SOIB.

"El Govern hará todo lo que legalmente pueda para ayudar a los trabajadores. Estamos pendientes del desarrollo de los acontecimientos, que ha sido muy rápido. Hay que esperar a la recolocación efectiva de los trabajadores; puede ser que se recoloque a mucha gente", ha indicado Camps.

La directora de Trabajo ha prometido que el ejecutivo autonómico seguirá muy de cerca el desenlace de esta situación y se mantendrá en permanente contacto con los ministerios.

En relación a la denuncia de los sindicatos sobre las "maniobras" en la venta de Orizonia, Camps ha preferido no manifestar ninguna opinión sin tener prueba alguna, pero ha asegurado que estudiarán estas acusaciones.