Gasóleo a precio de oro, un Govern deudor, nuevos competidores con salarios ´low cost´ y una isla seca de turistas en invierno. Todos estos contratiempos han empujado a la principal compañía de autobuses, Transunion, a presentar un expediente de regulación de empleo temporal, justificó ayer su máximo responsable, Miquel Florit.

La dirección de la empresa y los representantes de los trabajadores comenzarán en breve a negociar el número de profesionales afectados y el periodo de vigencia de la suspensión de empleo. La compañía acumula más de medio siglo de historia y da empleo a unos 400 trabajadores en temporada alta. En el ámbito del transporte discrecional, Transunion cubre traslados desde hoteles y cruceros, excursiones, eventos de empresa y rutas escolares. En invierno, parte de su flota se traslada de archipiélago para cubrir la temporada turística canaria.

Las compañías de autobuses atraviesan por una de las peores crisis de su historia pese a una campaña veraniega espectacular. En el caso de Transunion, las estrecheces económicas han repercutido en los ingresos de sus trabajadores. Aunque las nóminas están al día, los complementos siguen pendientes desde agosto. Son cantidades importantes en la retribución de un conductor: maletas cargadas, dietas, horas extra... La transportista ha planteado un calendario de pagos pendiente de refrendar en el tribunal de arbitraje balear (Tamib), confirma el presidente del comité de empresa, Rafael Calzado.

En calidad de responsable de Carreteras del sindicato USO, Calzado solicitará una reunión con los directores generales de Trabajo y Transporte del Govern y con la directora de Tráfico para abordar los riesgos derivados de las extensas jornadas laborales.

Estos peligros se han acentuado con la emersión de nuevas compañías que camuflan jornadas inabarcables mediante contratos de dos o cuatro horas, denuncia Rafael Calzado. "Es muy duro competir contra empresas que tienen costes salariales un 50% más baratos mientras nosotros cumplimos con el convenio. A esta circunstancia se añade un encarecimiento del gasóleo del 40% en los últimos dos años", ahonda Miquel Florit.