El conseller Bosch explicó ayer que la mayor parte del esfuerzo educativo ya se ha hecho en 2012, con lo que 2013 la prioridad es mantener la calidad con una reducción más leve. Educación tendrá así 23,8 millones menos, un 2,7% menos. Ese recorte implica que habrá 10,8 millones menos para sueldos en la pública y 4 de reducción en la concertada, bajadas que, según destacó Bosch, permite garantizar las nóminas del personal docente y el normal desarrollo de las clases (en gran medida gracias al aumento de la jornada y las horas lectivas de los profesores). Se reducen las becas de comedor y transporte, aunque el conseller recuerda que se abrirá la convocatoria de ayudas a la movilidad estudiantil. En Mallorca se seguirá con el proyecto del nuevo instituto de secundaria de Sant Marçal en colaboración con Marratxí.