El Consell de Mallorca calcula que importará 100.000 toneladas anuales de combustible sólido recuperado (CSR) para su incineración, con lo que se generará electricidad por un método que supondrá reducir las emisiones de dióxido de carbono a la atmósfera en 270.000 toneladas y se crearán 345 empleos.

La institución insular ha destacado en un comunicado que la aprobación en el Parlament de las enmiendas a dos proyectos de ley que permitirán la importación de residuos supondrá que se evitará la subida de la tasa de tratamiento a los ciudadanos y se fomentará la reactivación económica de sectores empresariales de la isla.

La importación, impulsada por el departamento de Medio Ambiente del Consell de Mallorca, permitirá hacer eficientes las instalaciones de Son Reus, "posibilitando la contención del precio de la tasa en 2013".

Se estima que en 2013 llegarán a la isla 100.000 toneladas de CSR, un material que ya se está importante en Mallorca para su uso industrial por parte de una empresa cementera.

Se prevé equilibrar la capacidad de la planta de Son Reus, con cabida para tratar 730.000 toneladas, de las cuales sólo se llega de media a las 500.000 aproximadamente.

El Consell ha explicado que el CRS es un producto derivado de tratamientos mecánico-biológicos con propiedades estables, independientes de los residuos de los que proceden, con un alto poder calorífico que permite su incineración con aprovechamiento energético.

La producción de esta electricidad, considerada en un 50 % renovable, supondrá el ahorro de 20 millones de euros en combustible y primario, y dejar de emitir 270.000 toneladas de CO2 de efecto invernadero que ahora producen carbones y gasóleo.

Las operaciones de traslado y tratamiento de CSR están reguladas por normativas específicas a nivel europeo que aseguran el cumplimiento de las especificaciones exigidas por la UE.

La institución insular y la concesionaria Tirme han mantenido contactos con varias ciudades de Inglaterra, Irlanda y el norte de Italia y se está a la espera de cerrar las negociaciones.

La actividad económica que se generará con la importación de CSR se estima en unos ingresos de 14 millones de euros y 345 puestos de trabajo.

Las enmiendas aprobadas hoy también incorporan diversas bonificaciones en materia de residuos, como reducciones de hasta un 50 % en la tasa de derribos y demoliciones para las entidades locales, a fin de reducir los vertederos incontrolados y ayudar a los ayuntamientos en su tarea de limpieza y control.

Se crean tasas específicas por residuos como los cárnicos, con bonificaciones de hasta un 70 % y se fijan tarifas para los lodos y la materia orgánica que actualmente se tratan sin ningún coste en la planta de Son Reus.

Las enmiendas introducen además medidas para facilitar el tratamiento de escorias con el fin fomentar la rehabilitación espacios medioambientales degradados como las canteras, y contribuir a una regeneración sostenible y equilibrado de estos lugares.