La consellera insular de Medio Ambiente, Catalina Soler, ha afirmado este martes que se prevé que a principios de 2013 lleguen los primeros residuos al puerto de Alcúdia para ser incinerados en Son Reus, los cuales ha insistido en denominar combustible puesto que es un producto tratado que "no huele, ni ensucia".

Soler ha detallado en una rueda de prensa, en la ha mostrado tres paquetes de combustible traídos de Inglaterra y Cataluña para demostrar que no se asemejan a la basura que se vierte en los contenedores, que a finales de octubre se prevé aprobar la ley que posibilite la importación de los residuos.

Después de la autorización del Govern y de la Unión Europea, ha añadido, ya se podrá empezar a traer combustible a la isla con el objetivo de amortizar la planta incineradora.

La consellera popular ha explicado que las negociaciones con los países emisores las está llevando Tirme, aunque la empresa proporciona estadísticas al Consell de Mallorca sobre el coste del transporte marítimo, las embarcaciones y del puerto donde se embarca y desembarca, que es el proceso más costoso.

Las ciudades de origen pagarán el transporte, pero precisamente cargar y descargar en los puertos es lo que hace a Mallorca menos competitiva, aunque las negociaciones indican que se obtendrán entre 70 y 80 euros por tonelada y en el primer año llegarán 100.000 toneladas.

Soler ha asegurado que con esta medida se le dará salida al sector marítimo y al de transportistas porque realizarán "bastantes viajes", ya que en cada barco pueden llegar 3.500 toneladas.

Durante el verano, ha proseguido la consellera, no se traerán residuos porque las instalaciones funcionan a pleno rendimiento y ha añadido que para evitar posibles incidentes siempre habrá alguien de Tirme en el puerto de salida para controlar los paquetes de residuos tratados.

Soler ha dicho que no habrá incremento de cenizas, que representan un 1 % de lo que se incinera y se almacenan en el depósito de seguridad que se encuentra en las propias instalaciones.

La consellera ha afirmado que Mallorca tiene unas instalaciones capaces de competir en el mercado europeo con todas las garantías medioambientales exigibles, ya que todos los residuos que lleguen serán autorizados por la Unión Europea.

Y ha añadido que estas toneladas permitirán, además de no aumentar la tasa de residuos a los ciudadanos, producir más energía renovable, ahorrar más de 20 millones de euros en combustible primario -carbón, gasoil y gas- y eliminar 207.000 toneladas de energía de CO2 de efecto invernadero que desaparecerá al producir esta energía ecológica.

Soler ha recordado que el PSIB pidió dos auditorías de 20.000 euros cada una que concluyeron que la solución era aumentar la tasa un 40 %, de forma que la incineración costaría 1.071 euros por familia y ha defendido que, "para no llegar a este absurdo", el PP ha sido responsable y ha buscado soluciones de futuro.

La encargada de Medio Ambiente ha criticado que la coalición PSM-IV-ExM le ha pedido al Consell que cometa una ilegalidad al reclamar que alarguen la concesión, ya que "es improrrogable hasta el año 2041".

Soler ha concluido diciendo que está abierta a que el departamento de Medio Ambiente dialogue con todos los partidos para buscar soluciones "reales, factibles y de futuro".

Amplía la información en la edición impresa de Diario de Mallorca

Adquiera el PDF de Diario de Mallorca