Iñaki Urdangarín, duque de Palma e investigado en el caso Palma Arena por supuesto desvío de fondos del Govern a través de su grupo de sociedades y otras entidades Nóos, medió en 2003 con los responsables del Tour de Francia para conseguir que Mallorca fuera escenario de la prueba ciclista internacional.
Urdangarín recibió en 2004 casi 300.000 euros del Govern por estudios sobre el impacto derivado del patrocinio por el Ibatur del equipo ciclista Banesto, que hasta 2007 compitió como Illes Balears.
Jean Marie Leblanc, director del Tour de Francia durante muchos años, declaró en Palma en el I Illes Balears Forum, organizado en noviembre del 2005 por el duque de Palma, que éste le propuso en 2003 traer su carrera a Mallorca.
Según Leblanc, Urdangarín le sugirió, junto al director general de Deportes del Govern Matas, Pepote Ballester (imputado también en el caso) celebrar en la isla una etapa del Tour. La idea le fue planteada en la entrega del Premio Príncipe de Asturias del Deporte al Tour.
Leblanc, que también fue galardonado en el Forum, explicó que no le pareció mal la propuesta de Urdangarín y Ballester, pero añadió que había lista de espera.
