­­El cirujano plástico de la Clínica Palmaplanas y profesor de la Universidad de Virginia, Ramon Llull Cerdà, remarca el gran potencial terapéutico de las células madre del tejido graso. El también director del Stem-Center de la clínica palmesana explicó ayer las ventajas de estas células en una charla organizada por la Real Academia de Medicina de las Illes Balears. Remarcó que se trata de un tejido accesible, abundante y rico en células.

—¿Las células madre del tejido adiposo tienen un gran potencial terapéutico?

—Efectivamente. Todas las células progenitoras adultas tienen un gran potencial terapéutico. La ventaja que tenemos en la grasa es que es un tejido accesorio, accesible y abundante, además es rico en células. En consecuencia, podemos hacer muchas cosas con estas células. Cuando tenemos muchas las podemos utilizar y tener un beneficio terapéutico más potente. Solo de la fuente de estas células ya tenemos una ventaja importante. En el tejido adiposo tenemos cien veces más células con núcleo (si no hay núcleo no podemos tener un efecto terapéutico) que en la sangre, que es una fuente de células normales.

—¿Qué potenciales terapéuticos tienen estas células?

—Tienen dos tipos de potenciales terapéuticos. Uno es que estas células se pueden transformar en otras. En concreto, en el tejido músculo-esquelético: músculo, huesos, vasos... Otra vertiente es la capacidad que tienen estas células de controlar las otras células vecinas.

—¿Qué utilidad tiene poder controlar las células vecinas?

—Tiene tres utilidades muy importantes que son la reparación o cicatrización, la revascularización y el control de la inflamación. Cuando queremos cicatrizar podemos recurrir a estas células. También acudimos a ellas cuando tenemos un hueso o una extremidad que no está vascularizado, y así ayudan a revascularizar dicha extremidad. O cuando tenemos una rodilla inflamada, estas células pueden desinflamarla. Estas células madre controlan las células que hacen cicatrices, las que hacen riegos vasculares y las que provocan la inflamación para que estos procesos se hagan de forma más beneficiosa al enfermo.

—Uno de los beneficios de las células madre del tejido adiposo es que se pueden obtener a través de procesos no invasivos como la liposucción.

—Efectivamente. Eso sí, la grasa también se puede obtener a través de un procedimiento quirúrgico, pero si no se quieren cicatrices se puede hacer a través de la liposucción.

—¿Se puede decir que este tipo de células "lo curan todo"?

—Que lo curan todo es muy atrevido pero sí que ofrecen unas nuevas herramientas para que los médicos puedan empezarlas a utilizar y mejorar los resultados en muchas enfermedades.

—¿En qué enfermedades mejoran los resultados?

—Ahora donde se utilizan de forma autorizada es en defectos de tejido adiposo en cara, pechos y contorno corporal.

—¿Habrá más avances?

—Sin duda, en enfermedades de corazón, fracturas de hueso, diabetes, insuficiencia renal... En estas enfermedades ya se emplean de forma controlada, bajo estrictos ensayos clínicos.

—Hace un año realizó la primera reconstrucción mamaria completa con células madre del tejido graso. ¿Hay novedades?

—De momento, estamos pendientes de una autorización para usar estas células en tejido músculo-esquelético. Por ello, ahora solo hacemos reconstrucciones tanto estéticas como funcionales de la mama.

—Pero es muy importante para una mujer que ha padecido cáncer de mama.

—Tiene mucha importancia utilizar las células madre del tejido graso para la técnica constructiva de la mama porque este tipo de cáncer es una enfermedad de dimensiones serias con gran impacto a nivel individual, social y sanitario. Únicamente el intento de devolver a estas mujeres aquello que la enfermedad les quitó, me parece un trabajo muy gratificante.