Cinco meses después, una nueva patera ha llegado a las costas mallorquinas. En esta ocasión, unos pescadores avistaron en la madrugada de ayer la embarcación con once inmigrantes a 22 millas del sur de Cabrera. Según informó Delegación de Gobierno, sobre las 5.30 horas la tripulación del barco de palangrero que faenaba por aquellas aguas dio aviso a Salvamento Marítimo. Posteriormente, dos patrulleras de la Guardia Civil remolcaron la embarcación con los inmigrantes irregulares hasta Portocolom, en Felanitx.

Una vez en el puerto felanitxer, una ambulancia esperaba a los inmigrantes. La mayoría llegaron en buen estado aunque dos de los jóvenes ilegales precisaron atención médica. Todas las hipótesis apuntan a que se trata de jóvenes argelinos. De hecho, todas las embarcaciones con inmigrantes llegadas a las costas mallorquinas procedían de puertos argelinos.

Los inmigrantes eran jóvenes, entre 20 y 30 años, y en la embarcación llevaban numerosas provisiones como cinco salvavidas, una brújula de juguete, colonia, toallitas, leche, dátiles, agua, cinco garrafas de 25 litros con gasolina y otras cuatro vacías... Cuando entraron en el puerto de Portocolom se ve que tenían frío y llegaron tapados con una manta. Asimismo, habían pintado con spray azul el nombre "María" en la embarcación e intentado borrar otras dos inscripciones escritas en árabe. Eso sí, en los remos llevaban inscrita una matrícula. La pequeña nave contaba con dos motores, uno de 40 caballos y otro de reserva. Cuando los agentes los bajaron al puerto, los inmigrantes iban bien vestidos ya que se habían cambiado de vestimenta una vez habían entrado en aguas mallorquinas.

Sobre las diez de la mañana, los once inmigrantes detenidos fueron trasladados a las dependencias de la Guardia Civil de Manacor y luego a la Jefatura Superior de Policía, en Palma, donde les incoaron un expediente de devolución. Una vez en Palma, los once irregulares tenían que pasar a disposición judicial.

Segunda patera

Esta embarcación con inmigrantes ilegales es la segunda que llega a las costas mallorquinas en lo que va de año. A mediados de enero, una patera arribó con ocho extranjeros irregulares en Cap Salines.