Sergi Pallerols (Barcelona, 1975) es psicólogo, sexólogo y, desde hace diez años, responsable de Infosex, un servicio del PAS, Punt de Assesorament de Salut (PAS) del Govern. Pallerols aclara dudas sobre sexualidad a través del mail( infosex@caib.es), descolgando el teléfono (901 500 101) o en asesorías en Avenida Alemanya 13. También hace talleres informativos en institutos, centros de ocio, asociaciones de padres y allá donde le llamen. En cuestiones de sexo aún existen muchos interrogantes.

– ¿Cuáles son las preguntas más frecuentes?

– La posibilidad de embarazo y enfermedades de transmisión sexual. Nos piden mucho por anticonceptivos, pero hormonales, intentan evitar pasar por el médico. Los que ya se han iniciado preguntan sobre dificultades como orgasmias, eyaculación precoz, disfunción eréctil, poco deseo... También hay muchas preguntas sobre ´la primera vez´. Las chicas se plantean si lo han de hacer o no. Si llama una chica y tiene muchas dudas siempre le aconsejo que vaya poco a poco. Que vayan cogiendo confianza a través de otras prácticas sexuales que no implican penetración. A través del coito hay muchas chicas que nos dicen que no logran placer, y eso es algo sorprendente. No se debe tanto a desconocimiento de la anatomía genital si no a que el modelo de sexualidad coital que se transmite no siempre sirve para conseguir determinados objetivos, como disfrutar del sexo. El proceso de socialización sexual se hace a través de los medios de comunicación.

– ¿Siguen llegando muchos mitos increíbles?

– Hay más información y llegan menos, pero todavía llegan, como respecto a la menstruación: no es bueno tener relaciones sexuales, no se pueden regar las plantas... O con la masturbación, que interrumpe tu crecimiento o te salen granos. Es cierto que los ´efectos secundarios´ no son tan heavys como antes, cuando te quedabas ciego. Respecto a embarazos, sí llegan cuestiones puntuales que ponen los pelos de punta, como si haciéndolo de pie no te puedes quedar embarazada o así, pero es puntual. Hay desinformación o información no completa. Por ejemplo respecto a las enfermedades, preguntan por la transmisión por la saliva o ponen el cáncer como enfermedad de transmisión sexual.

– Hay estudios que hablan de un alza del machismo en las parejas jóvenes.¿Detectan muchos casos de violencia entre los más jóvenes?

– Sí, no suele ser una violencia física, si no encubierta, muy invisible, no se percibe como violencia. Son conductas muy controladoras del tipo ´dónde vas cuando no estoy contigo´, ´porqué te vistes así si yo no estaré´, revisar el móvil... Algunas chicas lo perciben como que su novio es celoso, pero porque le quiere. Algunas perciben que no es normal y viene a hablarlo. Algunas vienen a preguntar cómo dejarlo, no se atreven por miedo a la reacción que tendrá.

– ¿Todavía da mucha vergüenza preguntar sobre sexo?

– Sí, pero depende de la franja de edad. Por ejemplo ahora hablamos con abuelos y abuelas que se han quedado solos y que a través de Facebook conocen gente. No es lo habitual, pero sí nos llegan. Los más jóvenes utilizan más el correo electrónico y los mayores de 18 años ya vienen aquí o llaman. También depende del tipo de pregunta. Pero sí, todavía cuesta, hay vergüenza y sobre todo en algunas preguntas. Por ejemplo, la masturbación. Debemos haber recibido mil preguntas de chicos: ´¿cuántas veces lo puedo hacer al día?´, ´¿me saldrán granos o no?´, ´¿me quedaré pequeño?´, ´¿si lo hago muchas veces se me secarán los testículos?´... Las chicas no preguntan por esto, aunque la mayoría de consultas, entre el 60 y el 70%, son de chicas.

– ¿Por qué tema preguntan ellas?

– La mayoría de sus dudas vienen asociadas a una problemática,no son por curiosidad. La problemática en sexualidad, tal y como se tienen las relaciones, suele recaer en ellas: hablamos de embarazos sobre todo. Desde que la píldora post-coital se vende en las farmacias libremente han disminuido las consultas sobre la posibilidad de embarazo y la posibilidad o no de que se les niegue la píldora. Antes era una pregunta muy típica.

– La nueva ley del aborto permite a las menores de 16 años abortar sin consultar a sus padres si hay posibilidad de conflicto, ¿llaman más para preguntar por esta opción?

– Hay menos llamadas, no sé por qué. El aborto es el tema sobre el que hay más miedo a preguntar. La pregunta más habitual en este tema es el ´dónde ir´ a hacerlo. Con la nueva ley está todo más difuso, se puede tramitar por la sanidad pública y se supone que muchos de estos casos ahora pueden ir por la pública. Pocas veces después del aborto podemos hacer apoyo a la persona, que ha quedado tocada.

– ¿Qué se les queda de series como ´Física o Química´?

– Utilizamos vídeos de estas series para debatir y fomentar espíritu crítico. El modelo que transmiten es que el sexo es algo fácil que te permite conseguir una serie de éxitos. No se tiene en cuenta el aspecto emocional, no se habla de anticonceptivos... En esta serie en particular se utiliza mucho ´la marcha atrás´. Lo que están dando de referente choca completamente con la manera en qué damos el tema los que nos dedicamos al mundo educativo.

– ¿Hace falta más educación sexual en los colegios?

– En el currículo escolar sólo se trata el tema de la reproducción humana. Creo que sí haría falta, a lo mejor no una asignatura completa, pero sí una serie de horas. Se ha de regular por ley. Se hace de manera muy diferentes según las inquietudes de cada centro, algunos sólo buscan cubrir el expediente y llaman a una persona para que haga una charla de una hora.

– Cada vez que en un material didáctico sobre sexualidad se trata el tema de la masturbación se levanta la polémica.

– Hace diez años los colegios pedían el taller de sexualidad para Bachillerato, ahora lo piden para 1º y 2º de ESO. Ha habido una percepción de que es necesario formar a las personas antes de que se inicien. Hay gente que piensa que si hacemos una actividad a gente que aún no se ha iniciado estamos fomentando que se inicien y ponen el grito en el cielo, y en realidad eso dependerá de otros factores, con quien va, los amigos, el ambiente en casa... Hoy lo que pasa es que las relaciones sexuales son como un objeto de consumo para los jóvenes, las utilizan para otras finalidades: la aceptación, el éxito social...

– ¿Los más mayores qué preguntan?

– Más o menos lo mismo que los jóvenes. Algunas te dicen ´es que el novio que tengo ahora va muy a saco y no sé qué hacer´. Han tenido una educación muy represiva y ahora se sienten liberadas y que hay muchas posibilides de vivir libremente el tema de la sexualidad, algo que ellas no habían podido hacer. Y claro, quieren aprovechar los años que les quedan. Hablamos a partir de los 60 años o así. También hay abuelos que piden información sobre la Viagra. A esta gente conviene darle unas pautas sobre como disfrutar de la relación sexual de determinada manera, que no será la misma que cuando tenían 20 años.

– ¿Ser virgen es un motivo de vergüenza para algunos?

– Parece que los chicos tienen que nacer enseñados, tener la iniciativa y ser responsables de que todo vaya bien mientras que la chica tiene que ser pasiva, más tímida... porque una chica que exterioriza mucho su deseo sexual la juzgarán como sucia. Muchas chicas para no descontentar al chico no le dicen que es su primera vez, o no se lo pasan bien pero aguantan por miedo a la reacción. Trabajamos para que se aseguren de que realmente tienen motivos para tomar esa decisión. Hay chicas que llaman porque se sienten presionadas.

– ¿También sienten presión para hacerlo sin preservativo?

– Sí, es el famoso ´con preservativo no es tan guay´. Es alucinante porque muchas veces repiten esta información antes de haberse iniciado. Un niño de 11 años me dijo ´es que sin condón mola más´. Se lo había dicho su hermano. Otros me dicen ´es que sin condón no siento nada´. También hay chicas que tienen esta creencia. Hay que reflexionar sobre qué es lo que más le conviene. Lo que quita placer es pensar que quita placer. Además, también hay prácticas sexuales no coitales.

– ¿Tienen prejuicios respecto a las relaciones homosexuales?

– Uno de los cambios que he notado es más tolerancia hacia la diversidad. Cuando vas a los institutos siguen oyendo la frase de ´uuuh, putos gays´, o ´maricones no´, pero son dos o tres. La mayoría no tiene ningún problema ni exterioriza rechazo.