Los miembros del claustro de profesores del colegio concertado Can Bonet, de Sant Antoni de Portmany, expresaron ayer su "apoyo incondicional" a su director, imputado por varios delitos de presuntos abusos a menores.

Los docentes del centro educativo reclaman la presunción de inocencia de su colega, "a la cual toda persona tiene derecho", y exigen que no se haga un "juicio paralelo de los hechos antes que la Justicia emita un fallo". Estas manifestaciones van en la línea de la postura del Obispado de Eivissa, que ha reclamado el respeto del derecho constitucional a la presunción de inocencia del capellán. El Obispado sostiene que hasta el día de hoy no ha recibido "directamente" ninguna acusación.