El Govern quiere, y así se lo ha transmitido al Gobierno central, capacidad para poder fijar sus propias tasas aeroportuarias. O como mínimo una flexibilización de la política de tarifas y precios, que permita mejorar la competitividad, incentivar nuevas rutas y mercados y trabajar para la desestacionalización del producto turístico.

De este modo, el Ejecutivo autonómico defiende la "descentralización e individualización" del sistema de gestión aeroportuaria, ya que, a su juicio, este modelo permite "mejorar la competitividad y alinear la estrategia de gestión aeroportuaria con las necesidades de la economía y el transporte de cada ámbito insular y del conjunto de Balears".

Ésas son algunas de las exigencias incluidas en el informe entregado por el conseller de Movilidad, Gabriel Vicens, a representantes del ministerio de Fomento; documento en el que el Govern un "estatuto de singularidad" para los aeropuertos de Balears y se opone a la privatización o semiprivatización de los mismos, ya sea a través de regímenes concesionales a favor del sector privado o mediante cualquier otra fórmula que suponga la pérdida de la gestión pública. Durante este encuentro, según informó la Conselleria de Medio Ambiente y Movilidad, el secretario de Estado manifestó a Vicens y a la directora general de Transporte Aéreo y Marítimo, Joana Amengual, que no existe "ninguna intención" de implantar un régimen concesional en los aeropuertos del archipiélago balear, tal como sí se ha anunciado para los aeródromos de Barajas y El Prat.

Visita a Blanco

El máximo representante del ministro de Fomento, José Blanco, recibió ayer en Madrid a Francesc Antich para firmar un convenio para la ejecución de distintas infraestructuras en las islas.

Blanco señaló que pese a las dificultades económicas se ha suscrito con Baleares un convenio de colaboración por el que este departamento invertirá 37,5 millones de euros en los años 2010 y 2011 en la ejecución de diversas infraestructuras en esta comunidad.

El ministro hizo estas consideraciones tras firmar con Antich un acuerdo para la ejecución de las obras de tren en Mallorca, en el puerto de la Ciutadella en Menorca y en los drenajes de autopistas en Eivissa. El titular de Fomento desglosó el montante de la inversión y explicó que se destinarán al servicio ferroviario de Mallorca 23 millones de euros, al puerto de Ciutadella se consignará una financiación de 14 millones y en drenajes de autopistas en Eivissa se invertirán 500.000 euros.

El ministro informó de que hoy está previsto que el Consejo de Ministros apruebe la firma de una addenda en la que se fijarán los nuevos compromisos de financiación. Blanco subrayó que la voluntad de inversión del Gobierno en el archipiélago es "clara y decidida" y añadió que una muestra de ello es la firma y desarrollo de estos convenios. Asimismo aseguró que las acciones de su departamento seguirán en la misma línea de "favorecer y facilitar" las comunicaciones del archipiélago, las internas y las externas.

Por su parte, el president Antich dstacó el esfuerzo del Gobierno de España en relación a Balears en esta legislatura, y aseguró que se ha pasado de unas inversiones anuales de 196 millones a 400 millones de euros de media. Con ello, indicó Antich, queda patente el "grandísimo apoyo" del Ejecutivo central a las inversiones de las islas, y ha resaltado que, además, se han adoptado de "común acuerdo".