El puente de Son Espases demostró ayer que está preparado para abrirse al tráfico y soportar grandes cantidades de peso. Los ingenieros del Consell realizaron las pruebas de carga, colocando 16 camiones de 38 toneladas cada uno sobre el viaducto para evaluar su capacidad de resistencia y de seguridad. Las 600 toneladas que el puente soportó, en diferentes puntos a lo largo de sus 280 metros, demostraron que el vial aéreo construido para descongestionar el tráfico del hospital de Son Espases está en condiciones para abrirse al tráfico a partir de mañana.

Los ingenieros colocaron sensores entre cada uno de los pilares. Estos sensores estaban unidos a unos alambres que sirvieron para calcular la resistencia del puente en momentos de máximo peso. Por ordenador se controló los movimientos de las juntas de dilatación para conocer las variaciones de los tramos del viaducto. Según indicó Ignasi Galmés, ingeniero de Carreteras del Consell, "el resultado es más satisfactorio de lo esperado. Nosotros calculábamos que en los momentos de máximo estrés de carga habría cesiones que podrían llegar a los 7 centímetros y sólo se ha llegado a los 5". Galmés explicó que este tipo de pruebas de carga en movimiento es la primera vez que se realizan en Mallorca, ya que este puente es el más largo jamás construido en Balears. Las pruebas se prolongaron durante toda la jornada de ayer y probablemente sigan el día de hoy. Los técnicos del Consell pronosticaron que el viaducto no se abrirá al tráfico hasta mañana viernes.

En estos momentos se están instalando las barreras de seguridad a cada lado del puente. Se trata de vallas especiales capaces de aguantar los impactos de un camión de gran tonelaje a 80 kilómetros por hora. A esa velocidad, el Consell garantiza que el pesado vehículo no se desplomará.

La colocación de señalizaciones y de alumbrado es una labor que se realizará la próxima semana. Se trata de trabajos que se pueden acometer con el tráfico abierto.

El viaducto de Son Espases acogerá los vehículos en dirección a la UIB y Valldemossa, mientras que el tráfico que acuda al hospital de Son Espases utilizará la rotonda existente y que discurre por debajo del puente recién construido.

El presupuesto del Consell para esta importante infraestructura ha sido de 5,3 millones de euros. Ha consistido en la instalación de grandes piezas de acero cubiertas de asfalto y asentadas sobre pilares de hormigón.