Altos cargos del Ib-Salut mantuvieron ayer una reunión con los sindicatos de la mesa sectorial de Sanidad para intentar llegar a un acuerdo sobre la modificación de 240 turnos laborales que afectarían a una buena parte del personal sanitario, unos tres mil trabajadores de Son Dureta. Fuentes asistentes a la reunión señalaron que en el transcurso de ella se incorporó el director general del Servei de Salut, Josep Pomar, quien aseguró a los representantes sindicales que entre el 26 y el 29 de noviembre estaría "listo hasta el último enchufe en Son Espases". UGT le recordó que el hospital funciona con personas y para las personas. Ambas partes, sindicatos y dirección, quedaron en verse la próxima semana para intentar acordar los cambios en los turnos.