Como ya es habitual en el PP, las críticas no se lanzan públicamente, y menos delante del líder. En consecuencia, los portavoces municipales del partido en la oposición pasaron ayer de puntillas sobre la espinosa elección de María Salom como candidata a la presidencia del Consell de Mallorca. El mayor reproche a José Ramón Bauzá por esta designación –según las versiones de la reunión a las que ha tenido acceso este diario– provino de boca del líder popular de Campanet, Miquel Pons. Éste dijo no entender que Salom vaya de número uno, y añadió que si le hubieran "dado a elegir entre una lista de 50 nombres", él para nada "la habría puesto".

Por contra, Bauzá defendió la idoneidad de la próxima cabeza de cartel insular – "es la mejor"–, y negó rotundamente que se la hubiera impuesto el partido en Madrid. El presidente aseguró que antes de tomar la decisión hizo una ronda de consultas a más de un centenar de miembros destacados del PP, y que Salom reunía el perfil demandado.

Apoyo a la ofensiva judicial de Gordillo

El presidente también respaldó las actuaciones del ex fiscal de la Audiencia Nacional y fichaje jurídico estrella del PP, Ignacio Gordillo, frente a algunas críticas que ayer hubo por la ofensiva lanzada contra jueces y fiscales de Balears, con resultado hasta ahora en balde. "Nos lo han enviado de Madrid, y hace muy buena labor", sostuvo Bauzá.