El presidente de la Asociación de Promotores de Balears, Gabriel Oliver, ha afirmado que ya no hay margen para bajar más el precio de la vivienda, que calcula ha descendido un 15% desde el comienzo de la crisis, y ha augurado que en 2013 se acabará con el "stock" de 3.800 casas que quedará este año en Mallorca.

En una rueda de prensa celebrada esta mañana para presentar la segunda edición de la feria de vivienda Firastock, Oliver ha presentado el panorama actual de las casas de primera mano de Mallorca.

En esta isla este año se han vendido, hasta agosto, 4.000 viviendas, una cifra parecida a la del año 2005 y un 54 por ciento mayor que la registrada en 2009. En 2010 también se han finalizado otras 2.000 casas, un 43 por ciento menos que el año anterior.

Estos datos demuestran, según Oliver, que existe "una demanda potencial de vivienda en Mallorca" y, de seguir así la tendencia, hacen creer a los promotores que en 2013 se podría acabar con el excedente de vivienda construida, unas 3.800 en Mallorca frente a las 5.800 de 2009.

De acuerdo con los cálculos de los promotores, en 2011 y 2012 se terminarán 1.000 viviendas anuales en Mallorca (las ya visadas) y se podrían vender otras 3.000 anuales.

En 2013, vaticinan que se acabarán otras 2.000 y se venderán 3.500, unos datos que, de cumplirse, dejarían ese año un "stock" de 84 casas y acabarían así con el excedente actual.

Oliver ha esperado que el próximo año se pueda activar el sector inmobiliario y volver a crear empleo en él, aunque lo ha condicionado a dos factores externos: la fluidez de la financiación y la agilización de los planeamientos urbanísticos.

A este último respecto, ha criticado que las administraciones de Baleares deben "hacer los deberes" y poner fin a la paralización de licencias en los planeamientos cuando el suelo no es urbano.

Respecto al coste de la vivienda en Baleares, Oliver ha afirmado que "las empresas ya han ajustado todo lo que podían su precio", una bajada que ha cifrado en un 15 por ciento desde el comienzo de la crisis.

"Más allá de este límite supondría la desaparición de las empresas", ha explicado a este respecto, a lo que ha añadido que, a su juicio, el mercado ha entendido este mensaje.

También ha indicado que de esta crisis los promotores han aprendido a actuar con "precaución", en el sentido de hacer lo que el mercado demanda.

Respecto a la feria inmobiliaria que se celebrará a partir del jueves y hasta el domingo en la plaza de España de Palma, Oliver ha indicado que se centrará en la exposición de 500 primeras viviendas, con la finalidad de que los compradores se puedan beneficiar de las desgravaciones fiscales que el Gobierno dejará de ofrecer a partir del 31 de diciembre.

Oliver ha recordado que esta desgravación, que ahora solo se aplicará a rentas menores a los 17.000 euros anuales, supone una rebaja de 1.300 euros mensuales de media durante todo el periodo que dura la hipoteca.