La consellera de Turismo y Trabajo, Joana Barceló, ha destacado hoy que los 21.400 nuevos puestos de trabajo generados en Baleares en el tercer trimestre de 2010 representan el 30 por ciento del incremento registrado de julio a septiembre en toda España y demuestran el "dinamismo" de la economía insular.

Barceló, que ha dado cuenta de los datos baleares de la Encuesta de Población Activa (EPA) acompañada del director general de Planificación Estratégica, Llorenç Pou, ha puesto el acento en que el mercado laboral balear sigue caracterizado por un importante incremento de la población activa, que alcanzó las 5.300 personas en el pasado trimestre.

Este fenómeno, que contrasta con la evolución del conjunto de España (-800 personas), dificulta la reducción del paro, que en términos interanuales aumentó un 16,1 por ciento, pero respecto al trimestre anterior bajó un 13,3 por ciento, dejando la tasa de desempleo en el 17,1 por ciento de la población activa.

La EPA pone de manifiesto, ha incidido Pou, que casi una cuarta parte del aumento interanual del paro no se debe a la destrucción de empleo sino al incremento del volumen de demandantes de trabajo.

La consellera ha resaltado que la población activa alcanzó a 30 de septiembre su máximo histórico, con 610.500 personas, 3.500 más que un año antes, un crecimiento debido exclusivamente a la incorporación de 6.400 mujeres al mercado de trabajo, ya que los hombres dispuestos a trabajar bajaron en 2.900.

En su análisis, el Govern también ha puesto el acento en que Baleares es la comunidad donde más personas entre 16 y 65 años quieren trabajar, con un 68,1 por ciento, y la que tiene a más población ocupada, un 56,4 por ciento de la población activa.

Para el departamento que dirige Barceló, los datos de la EPA demuestran el cambio de ciclo en el principal sector económico del archipiélago, los servicios, en los que por segundo trimestre consecutivo de julio a septiembre se registró un incremento neto del empleo en términos interanuales, con una mejora del 1,8 por ciento.

Esta situación contrasta con la de la construcción, sector en el que el empleo se redujo en un 85 por ciento respecto al tercer trimestre de 2009.