La ex gerente del Consorcio para el Desarrollo Económico de Baleares (CDEIB) Antònia Ordinas ha afirmado hoy al juez que "era 'vox populi' y muy extendida" que en el Instituto Balear de Turismo (Ibatur) se pagaban comisiones durante el pasado mandato, las cuales eran superiores al 15 por ciento.

Ordinas ha declarado hoy como imputada durante más de una hora ante el juez Juan Ignacio Lope Sola, que instruye el llamado "caso Ibatur" sobre el supuesto desvío de fondos y cobro de comisiones en torno a este instituto público, un organismo dependiente de la Conselleria de Turismo durante la pasada legislatura del PP.

La ex gerente del CDEIB, que pasó varios meses en la cárcel por otro caso de supuesta corrupción, el "caso Scala", ha afirmado que el ex director general de Promoción Industrial Kurt Viaene le dijo que en su consorcio "eran muy tontos" porque cobraban pocas comisiones en comparación con el Ibatur, un instituto que, según él, "era el modelo" a seguir en este tema.

Si en el caso del CDEIB estas comisiones -que percibían ella misma, Viaene y el ex conseller del PP Josep Juan Cardona- rondaban el 5 y el 15 por ciento de lo que se facturaba a las empresas que las pagaban, en Ibatur, le aseguró Viaene, "se pagaba mucho más", aunque no precisó el tanto por ciento al que se refería, ha dicho Ordinas.

"Todo el mundo lo hace", le dijo Viaene sobre las comisiones, una práctica extendida de la que, según la imputada, sabían trabajadores de la administración, empresarios y periodistas.

La "diferencia" entre el CDEIB y el Ibatur, le relató Viaene a Ordinas, es que en el consorcio "los trabajos se hacían con sobrecoste" y en el instituto directamente "no se hacían".

Ordinas, en libertad bajo fianza tras admitir en prisión que escondió en el jardín de su casa una caja de Cola-Cao con 240.000 euros dentro, colabora con la Fiscalía en estos dos casos y ha admitido haber cobrado comisiones del CDEIB, aunque hoy ha sostenido que de Ibatur no recibió "nunca nada".

La ex gerente ha indicado que el CDEIB tenía problemas de financiación y que, cuando lo hizo saber en una reunión, el ex gerente del Ibatur Raimundo Alabern -también imputado- le dijo que era "absurdo" que se preocupase por eso, ya que "para Ibatur era muy fácil conseguir financiación" por medio de préstamos.

La imputada ha sido preguntada por la colaboración del CDEIB en el proyecto "Honey Moon" del Ibatur sobre promoción turística en China para recién casados, investigado por supuestos desvíos de fondos.

Ha dicho que si bien en un principio puso 210.000 euros, al ver que no se justificaba el dinero se forzó al ex concejal del PP y sobrino político del ex presidente Jaume Matas, Felipe Ferré, a devolver el dinero.

Según Ordinas, Ferré, con quien participaba en varias empresas que se beneficiaron de contratos del Ibatur y del CDEIB y que la semana pasada declaró ante el juez en este caso, "presumía de tener acceso directo a las cúpulas" y era quien entregaba las comisiones del CDEIB a Viaene.

También ha sido preguntada por el imputado Kamal Dorai, que se encargaba del cáterin de ferias y eventos del Ibatur, y ha dicho que no trabajó para el CDEIB a pesar de que Alabern quería que fuera así.

Según Ordinas, era "vox populi" que Dorai, quien supuestamente pagó comisiones al Ibatur, hacía unos cáterins "infectos" con productos de "baja calidad" y altos precios.

"El producto que ofrecía no era de los que tenían las garantías de producción insular, de hecho se comentaba con mucha guasa que en una de las ferias ofreció un queso de una región de España que no era el de Mahón, que era el que tenía que estar en esa feria", ha asegurado.