Lo mejor valorado del proceso

GUIAS DOCENTES

El profesorado sigue la guía docente.

Los alumnos valoran que los profesores sigan el temario y las pautas marcadas en la guía docente. En concreto, tres cuartas partes de los alumnos dijeron estar "satisfechos o muy satisfechos" con este aspecto y sólo un 21% hizó una lectura negativa. Aún así, algunos estudiantes consultados indicaron que se nota que algunos docentes "improvisan" y que están "algo desorientados".

PARTICIPACIÓN EN CLASE

Los profesores se esfuerzan en fomentar la participación en clase.

Parte de la filosofía Bolonia busca que las clases no se limiten a un profesor-emisor y un alumnado-receptor sin más. Las directrices comunitarias hablan de estudiantes que participan en clase y contribuyen a hacerla más dinámica así como de profesores que fomentan esa participación. Esto ha gustado: un 72% de los estudiantes valoran ese esfuerzo frente a un 26% que no está satisfecho.

TUTORÍAS

Los profesores hacen buenas tutorías y orientan correctamente.

Las tutorías han existido siempre, pero el Espacio Europeo de Educación Superior les otorga un importante papel. Como el trabajo autónomo del alumno se tiene en cuenta al configurar los créditos, se resaltan las tutorías como forma de orientar a los estudiantes "y prevenir fracasos y abandonos", recuerda Mª Jesus Mairata. Un 63% de los alumnos de primero están satisfechos.

Lo peor valorado del proceso

CARGA DE TRABAJO

El sistema de evaluación continua supone más trabajo diario.

La evaluación continua, los trabajos semanales y los exámenes parciales es, de lejos, lo peor valorado de la adaptación a Europa. Más de la mitad de los estudiantes señalan su descontento con la carga de trabajo a la que tienen que enfrentarse continuamente (algo que tampoco gusta mucho a los docentes). El universitario que no va a clase, consigue los apuntes en el último momento y se presenta al examen final, ha muerto.

POCA INFORMACIÓN

Los alumnos echan en falta más información por parte del servicio administrativo.

Los primeros momentos de Bolonia en la Universidad, en el momento de matricularse, hubo cierta confusión y los estudiantes (en concreto un 49%) echaron en falta más información parte del servicio administrativo. En este caso los resultados están bastante igualados y un 44% del alumnado sí que está satisfecho con la información recibida por parte de la Universitat.

COORDINACIÓN DOCENTE

El alumnado cree que los profesores podrían coordinarse mejor.

La coordinación docente está entre los tres aspectos peor valorados, pero lo cierto es que casi la mitad del alumnado está satisfecho frente a un 43% que no lo está. Los datos obtenidos en estas encuestas –que forman parte de la cultura de evaluación que también trae Bolonia– hablan a favor de la adaptación y muestran un contento generalizado y global. La UIB espera ahora los resultados de encuestas del segundo trimestre.