El año recién iniciado va a ser "durísimo" para el sector de la construcción a causa de la prevista caída en la inversión pública, según se ha pronosticado desde la patronal balear. Al respecto, se pone de relieve que la segunda fase del Plan E anunciada por el Gobierno central supondrá para las empresas contratistas sólo un 40% de los ingresos conseguidos durante el pasado año, tanto porque se han recortado los presupuestos como por el hecho de que se va a permitir que el 20% de los mismos sea destinado por los Consistorios a cubrir su gasto corriente, dado el nivel de endeudamiento en el que han caído. Además, se recuerda que en esta nueva edición los objetivos también han registrado modificaciones.

Desde la patronal se señala que este recorte se produce en el peor momento, por la dependencia que actualmente registra el sector de la obra pública. Así, se destaca que durante los primeros once meses del pasado año el valor de la inversión privada –como la construcción de viviendas– se situó en Balears en torno a los 793 millones de euros, mientras que la realizada por las Administraciones públicas ascendió a 785 millones. Hay que tener en cuenta que esta última cifra sólo incluye los proyectos valorados en más de 350.000 euros y cuyo concurso debe salir publicado en el BOIB, por lo que la cifra real podría aumentar en 15 o 20 millones. Por contra, en los once primeros meses de 2008 el valor de la inversión privada en las islas fue de 1.147 millones de euros y el de la pública de 378 millones.