Uno de los contratos que ha llamado la atención de la Sindicatura de Cuentas es el de las obras de restauración de las fachadas del centro cultural la Misericòrdia de Palma. El Consell primó en su adjudicación que la empresa beneficiada redujo el plazo previsto para la obra a 16 semanas. Al final duró 14 meses, pero no le penalizó.