El presidente de la Federación Hotelera de Mallorca, Antoni Horrach, declaró que la ligera recuperación de turismo alemán prevista para el próximo año se va a ver favorecida por la previsible desaparición de dos factores que durante el pasado verano jugaron claramente en contra de Balears, como fueron los atentados de ETA y el temor entre algunos visitantes a la gripe A. Sin embargo, se va a mantener la situación de incertidumbre económica, que será especialmente evidente en el caso de los visitantes británicos y españoles.

Respecto a los ataques de la banda terrorista, Horrach reconoció que aunque apenas conllevaron cancelaciones sobre las contrataciones realizadas previamente, sí tuvieron un efecto demoledor sobre las ventas de ultima hora, hasta el punto de señalar que una conocida cadena hotelera vio como la demanda de última hora descendió tras estos incidentes en torno a un 80%.

El presidente de los hoteleros mallorquines reconoció que ese golpe fue especialmente duro en un año en que los niveles de ocupación estaban siendo mucho más bajos de lo habitual.

En cuanto a la gripe A, hay que recordar la emisión de imagenes en las que se observaba a turistas llegando de los aviones con mascarillas, lo que provocó la denuncia por parte de algunos empresarios isleños de que ese comportamiento había sido promovido por las autoridades de algún destino competidor.