La crisis ha obligado a la mayoría de las comunidades autónomas a diseñar, por primera vez en su historia, unos presupuestos a la baja, condicionados también por las cantidades que las autonomías tendrán que devolver por los anticipos a cuenta recibidos.

Según la información recabada por Efe de los gobiernos regionales y de Ceuta y Melilla, los presupuestos de 2010 se verán mermados respecto a este año en once comunidades, con un descenso más acusado en el País Vasco, donde caen un 8,6 por ciento, seguido de Balears y Canarias, con bajadas que superan el 4 por ciento.

Cataluña, Castilla-La Mancha, Navarra, La Rioja y la Comunidad Valenciana, además de Ceuta y Melilla, han incrementado sus partidas, sobre todo la primera, con un alza del 7,3 por ciento. En Asturias aún no se han aprobado, pero la estimación de su gobierno apunta en ese sentido.

Crecen Sanidad y Educación

A pesar de que la mayoría de las regiones se enfrentarán en 2010 a unos presupuestos ajustados, la sanidad, la educación y las políticas sociales serán áreas privilegiadas, que verán crecer sus partidas respecto a 2009, aunque en el caso de alguna comunidad, como Madrid, se congelará el gasto social.

El caso más llamativo será el del País Vasco, que ha aprobado para 2010 un presupuesto de 10.315 millones, lo que ha supuesto un descenso del 8,6 por ciento respecto a 2009, con un endeudamiento de 1.914 millones de euros.

También decrecerán de forma significativa los presupuestos de Balears y Canarias, con porcentajes del 4,5 y 4,2 por ciento, respectivamente.

En el caso de Balears, las cuentas se enmarcan en un escenario económico "problemático" donde el PIB, según previsión de su Ejecutivo, disminuirá en torno a un 1,5 por ciento, mientras que en Canarias los tributos del Régimen Económico Fiscal caerán un 24 por ciento.