La oficina de derechos lingüísticos de la Obra Cultural Balear (OCB), respaldó ayer la denuncia de un joven, Iván Cortés, quien sostiene que el pasado 7 de agosto fue agredido físicamente por agentes de la Guardia Civil en el aeropuerto de Son Sant Joan por dirigirse a ellos en catalán.

El propio Cortés, acompañado por el coordinador de la OCB, Tomeu Martí, relató en rueda de prensa que el pasado 7 de agosto, al pasar junto a su novia por el control de pasajeros del aeropuerto para viajar a Londres, dos guardias civiles les pararon y les solicitaron la documentación. Según Cortés se la entregaron y se dirigieron en catalán a los miembros de la Benemérita, hasta que uno de ellos le dijo que le hablara "en español". El joven, según su denuncia, contestó en castellano y el guardia civil se dirigió a él amenazándole "de manera explícita".

Cortés afirma que, al no entender lo que le decía el guardia civil, le preguntó "cómo dice?" para que se lo repitiera. Entonces, "entre tres agentes" le condujeron a "un cuartito" y, antes de cerrar la puerta, le "pegaron en la cabeza, después en la boca, que me hizo sangrar, y por último me dieron otro golpe en el estómago".

"Tras la agresión, me explicaron que había sido una falta de respeto hablarles en catalán, que ellos estaban allá para protegernos", relató Cortés. Añadió que tras los golpes entraron otros dos guardias civiles más y preguntaron qué había pasado. "Uno de ellos respondió que el chaval le ha hablado en catalán y al cabo se le ha ido la mano", aseguró Cortés.

Precisó que, tras interrogarle, un guardia civil le notificó que le había denunciado "por alteración de orden público", si bien no le dieron copia de la denuncia. Cortés y su acompañante lograron coger el avión y, una vez en Londres, fueron a un hospital, donde se le efectuó un informe médico de las lesiones. A su regreso de Londres, acudió a la Policía Nacional y al juzgado de instrucción numero 4 para interponer una demanda por lo ocurrido.

El coordinador de la OCB calificó de "terriblemente graves estos hechos" que, según sostuvo, "la OCB ha comprobado en la medida de lo posible". Agregó que, dado que en el aeropuerto hay cámaras de vigilancia, "se podrán comprobar".

Para Martí, "el responsable político de estos hechos es el delegado del Gobierno, Ramón Socías, ya que es la persona que ha sido incapaz de evitar que se llegara a este punto". En este sentido, consideró que "la falta de respuesta" de Socías a "otros actos discriminatorios contra el catalán" ha provocado que "se llegaran a producir estos hechos injustificables".